Game of Thrones se convirtió en la serie que más sufrió la piratería en el 2013.
Para alegría de sus millones de seguidores, y para seguridad y tranquilidad laboral para los intérpretes de Juego de tronos, se confirmó esta semana que este programa de HBO tendrá una séptima temporada de acuerdo con datos de la revista especializada The Hollywood Reporter.
Ya en abril pasado, uno de los creadores de este producto televisivo, David Benioff, había señalado que Game of Thrones tendría una quinta y una sexta temporada.
DB Weiss, uno de los socios de Benioff, fue más allá y ha dicho que se estudia una octava temporada de la serie, aunque por ahora HBO no ha confirmado ni negado esta información.
"El contrato con los actores, que fija diferentes rangos salariales en función del peso del intérprete en la serie, implicó también subidas de suelo considerables por las temporadas quinta y sexta", señaló una fuente de HBO a The Hollywood Reporter.
Agrega el medio estadounidense que esto confirma que "los protagonistas de Juegos de tronos estarían entre los mejores pagados de la televisión por cable en Estados Unidos", aunque no dio cifras en concreto.
Lo cierto, es que los salarios más elevados de la serie "corresponden a Kit Harington (Jon Snow), Peter Dinklage (Tyrion Lannister), Lena Headey (Cersei Lannister), Emilia Clarke (Daenerys Targaryen) y Nikolaj Coster-Waldau (Jaime Lannister).
Por otro lado, desde Rabat, la agencia de noticias EFE indicó que los productores de Game of Thrones se "plantean rodar algunas de sus escenas de la quinta temporada en Marruecos" y dieron como fuentes de la noticia a representantes de la empresa marroquí Uarzazate Film Commissión.
La serie televisiva estuvo en el 2013 "durante 15 días en los estudios de Uarzazate, situados en el sur de Marruecos, y en la ciudad costera de Esauira, también en esta zona del país, para rodar varias escenas".
Mientras que la quinta temporada, que un parte ha sido rodada en España, será estrenada en el 2015.
Game of Thrones se inspira en las novelas fantásticas del escritor George R.R. Martin y fue la serie más pirateada en el 2013. Además, es la más vista de la historia de HBO, con una media superior a los 18 millones de espectadores por capÍtulo solo en EU, una cifra superior a la obtenida por The Sopranos".