Jaume Collet-Serra, un español que reside en Estados Unidos desde los 18 años, tiene sus días buenos y los no tantos, sí, como cualquier ser humano.
Solo que este director y editor, que comenzó a tener un cierto nombre rodando videos musicales de cantantes como Britney Spears y Enrique Iglesias, se dedica al negocio del entretenimiento, y su obra, o sea, sus decisiones artísticas, tanto las regulares como las pésimas, quedan registradas para la posteridad, o por lo menos hasta cuando tengamos un planeta más o menos habitable.
Collet-Serra, más de una vez, ha hecho películas que deberían ser llevadas a lo interno de un volcán en erupción para que la lava la destruya y no quede registro alguno de ese delito hacia el buen gusto.
En otras ocasiones lleva a cabo un cine medio efectivo, aunque no como para que esté en el Olimpo del séptimo arte y salude con afecto a Akira Kurosawa o Alfred Hitchcock, maestros de la acción y el terror, dos géneros que este europeo trata de alcanzar, sin esperanza de lograrlo.
Por ejemplo, La casa de cera, su debut en un largometraje, tenía una gran y única escena: cuando acaban con Paris Hilton, por lo menos, en la ficción. Vaya, algo es algo.
El estilo de este filme de 1985 seguía los lineamientos de la escuela tradicional del cine de terror y eso agrada cuando uno está cansado de ver las estúpidas formas que tienen los guionistas de ahora para acabar con un villano o con alguien que está en medio de un peligro inminente. El resto de este remake sobre asesinos en serie es despreciable.
Cuando pensabas que un artesano como él no podía cometer otro error de esos que nadie quiere recordar, se le ocurrió firmar ese adefesio que se tituló Goal! 2: Living the Dream.
Aquello fue tan espantoso que ni siquiera le regalaría una copia, ni aun pirata, al equipo de fútbol que menos me simpatiza del Mundial Brasil 2014. Lo siento, no voy a decir cuál es, por ahora.
Después logró subir un milímetro en su talento detrás de las cámaras con La huérfana (2009), otra razón para prohibirle a Collet-Serra rodar más producciones vinculadas a gente que mata a semejantes como pasatiempo sabatino.
A velocidad de tortuga con pereza y coja pasa a otro micro nivel con Sin identidad, donde conoce a Liam Neeson, quien hace muchos años fue un actor solvente y confiable, por allá en la década de 1990, salvo cuando participó en la saga del Batman de Nolan, y no nos pongamos exquisitos, también es divertido su desempeño como el policía bueno/malo en Lego.
Lo más reciente en la carrera de Jaume Collet-Serra, y de paso en la de Neeson, es Non-Stop, un pasito más en su lento ascenso a la montaña de la excelencia.
Digamos que es lo más alto en la hoja de vida de Collet-Serra. Aunque, un momento, aguarden, no es hora de saltar de alegría, lo que quiero decir es que se trata de lo mejor, entre lo peor, que ha hecho en su labor de cineasta.
Los críticos de Estados Unidos le dieron un 60% de aprobación a Non-Stop (Sin escala la llamaron en Panamá) y la audiencia norteña le dio un 72%.
Visto de otra manera, no es la clase de hazaña que puedes usar para que tus padres se vanaglorien con tus vecinos.
Algo que hace aceptable a Non-Stop es lo mismo que convierte en algo pasable casi todos los títulos fílmicos de Collet-Serra, que gracias a un par de giros argumentales interesantes, de la mano de algunos destellos de actuación potable de su elenco, un par de momentos de acción de fuerte calibre y uno que otro diálogo destacable, sus películas funcionan, y ese es el caso de este thriller sobre un agente del servicio aéreo de los Marshall que va a bordo de un vuelo de Nueva York a Londres, un viaje en el que unos terroristas cometen la idiotez de querer hacerle daño a los tripulantes de la nave, y de paso, obtener 150 millones de dólares.
Seguro que entre que sales de la sala de cine y llegas a tu casa has olvidado Sin escalas, pero quien lo debe tener presente es Liam Neeson a quien sí le gustó la experiencia, ya que será la figura principal del siguiente proyecto de Collet-Serra: Run All Night, previsto a estrenarse en 2015.
¿Cuál es tu película preferida de Liam Neeson? ¿Te gustó Non-Stop?