Después de 11 temporadas en el béisbol de las Grandes Ligas, el panameño Einar Díaz recibió la oportunidad de seguir en el deporte desde el banquillo y lo está aprovechando al máximo.
Einar Díaz
Técnico panameño
Fue en 2008, tras conversar con un amigo que los Orioles de Baltimore le abrieron la puerta para formar parte del cuerpo técnico de un equipo de la categoría de novatos o rookie.
Luego de siete años en la organización, el chiricano de 42 años va para su tercera campaña como asistente del instructor de bateo del equipo grande.
Se habló incluso que en 2015 podría ser el coach de tercera base; sin embargo, Baltimore la mantiene en su cargo desde que fue promovido en 2013.
“Es un trabajo importante porque hay que tratar con peloteros de diferentes calibres y explicarles sobre los diversos lanzadores”, afirmó Díaz, quien se encuentra de visita en Panamá.
Como pelotero, Díaz fue receptor y subió la Gran Carpa en 1996 con los Indios de Cleveland. Además, visitó los uniformes de los Rangers de Texas, Expos de Montreal, Cardenales de San Luis y Dodgers de Los Ángeles.
Entre sus recuerdos especiales como pelotero, el técnico comentó que está el día que bateó de 5-5 (en 2000 ante los Azulejos de Toronto) y estar en la postemporada, algo bien ponderado por él.
"Aunque pasas toda una temporada detrás del plato y te sientes cansado, cuando avanzas a los playoff sacas fuerzas de donde no hay para continuar".
En tres campañas tuvo la oportunidad de ir a la postemporada con los Indios, pero no logró llegar a la Serie Mundial.
Ahora, como instructor, regresó a los playoff con los Orioles, un equipo que en las últimas tres temporadas ha logrado avanzar en dos ocasiones.
Einar Díaz fue director de la selección de Panamá en el Mundial que precisamente se realizó en tierras istmeñas, quedando el equipo en el octavo puesto.
“Teníamos un equipazo y creo que pudimos llegar más lejos, y claro que me gustaría volver a dirigir el equipo panameño. Sería un honor”, agregó.
Sobre el talento panameño en el mejor béisbol del mundo, sostuvo que los nacionales tienen una desventaja porque juegan muy poco, al contrario de otros peloteros de la región.
“La liga nuestra es muy corta. En la medida que juegas más puedes estar mejor preparado para afrontar los retos en las ligas menores. A eso le añade el idioma y que algunos peloteros, sobre todo los latinoamericanos, no les gusta escuchar recomendaciones y a veces a los técnicos les molesta eso. Esos son males de nuestro béisbol, muy por el contrario de los peloteros dominicanos y venezolanos, en estos campos llegan más preparados y por ello tienen la ventaja”, dijo.