Los caficultores panameños ingresan a las grandes ligas de las trasnacionales. La producción pasó del suministro para el consumo local a ofrecer el grano como materia prima óptima en la elaboración de otros productos de exportación.
Licor a base de café y cápsulas de café compatibles con las máquinas Nespresso y Dolce Gusto de Nestlé son dos productos con el sello panameño. Bajo la marca Coffee Hat, el italiano Lorenzo Verlicchi se asoció con los propietarios de Finca Lérida en Boquete, provincia de Chiriquí, para elaborar un café en cápsulas que está listo en pocos minutos.
El proyecto nació de una visita de Verlicchi a la Finca Lérida, en mayo de 2015. Tras realizar el recorrido de la ruta del café y degustar una taza de geisha, el empresario italiano quedó encantado y le propuso a los dueños de Finca Lérida preparar un producto de exportación.
En febrero de 2016 parte a Padua, Italia, el primer contenedor de 40 pies con 30 toneladas de café en pergamino. El valor del contenedor fue de 160 mil dólares.
El 90% del contenedor llevaba la variedad de café catuai y el 10% restante el cotizado geisha. El grano de geisha cosechado en las tierras altas chiricanas se cotizó en la última subasta internacional en $275.25 la libra en proceso lavado.
La cápsula representa la síntesis de los tres valores de Coffee Hat: la excelencia de aromas, autenticidad de los granos y conveniencia en la elaboración de la bebida, explica Penélope Amoruso, directora ejecutiva de Grupo Pomelo, distribuidores en Panamá del producto.
En el mercado local se ofrecen dos variedades de café compatibles con la máquina de Nespresso. El café Panamá a base de la variedad catuai y el geisha, ambos cosechados en la Finca Lérida, en Boquete, a una altura entre los mil 700 metros y mil 800 metros sobre el nivel del mar. Cada caja contiene 10 cápsulas y su costo de introducción es de $6.50.
La máquina Dolce Gusto es compatible con el café Panamá, el chocolate y el cappuccino. El café Panamá, de la variedad catuai, y el chocolate vienen en una caja con 16 cápsulas y cuesta $9.99.
La caja de cappuccino a base de café catuai contiene 12 cápsulas, 6 de café y 6 de leche. El costo es de 7.99. El Coffee Hat se comercializa en el mercado europeo con mayor aceptación en Ibiza, Londres, Italia y España. En Panamá se distribuye a través de Grupo Pomelo.
En la ciudad capital se vende en la tienda Uber Shop, en Obarrio y se hacen entregas a domicilio. También están disponibles en los coffee Shop de Finca Lérida en Boquete y David.
“La semana pasada se entregaron los formularios para negociar la venta en los supermercados Riba Smith y Grupo Rey”, informó Amoruso.
Francisco Serracín y Roderick Tedman son dos caficultores de Boquete que se asociaron para preparar un licor a base de café geisha. “Roderick aportó la receta y nosotros el café geisha”, comentó Serracín, dueño de la finca Don Pachi Estate.
“Son muchas las pruebas a las que se ha sometido el licor para lograr la bebida casi perfecta. El licor geisha Don Pachi Estate tiene 24% de alcohol. Se elabora a base del grano geisha, proceso lavado y el secado al sol. Este grano se cosecha a mil 600 metros sobre el nivel del mar.
En una primera producción se programa elaborar 100 mil botellas de 750 mililitros al año. Su precio podría superar los $150. Un café de la región de Boquete se distingue por su acidez media alta, sabor achocolatado dulce y con un aroma floral.
De tierras altas chiricanas surge una de las líneas mejor cotizadas en el mercado internacional: el grano arábigo. Dentro de este tipo se destacan: el catuai, caturra, typica, bourbon, geisha, mundo novo, pacamara, villa lobo y el san ramón, entre otros.
Ambos productos debutarán hoy en el Coffee Fest Panamá, escenario que reunirá bajo un mismo techo a los representantes de la industria cafetalera local.