El ente responsable de la interconexión eléctrica centroamericana anunció la revisión del tiempo de respuesta de los países ante situaciones de emergencia, tras el apagón total que el sábado dejó a oscuras a Costa Rica y partes de Panamá.
La revisión está a cargo del Ente Operador Regional (EOR), que administra el sistema eléctrico centroamericano, en respuesta al más prolongado corte de electricidad que registra la red del istmo.
“Estamos haciendo revisiones en los procesos de restablecimiento para buscar que en próximos eventos haya una reducción de los tiempos (de respuesta)”, declaró a la AFP René González Castellón, director ejecutivo del EOR.
La tarde del sábado se produjo un colapso en el sistema eléctrico regional, que fue total en Costa Rica y parcial en Panamá y Nicaragua, con impactos menores en Guatemala, El Salvador y Honduras.
El origen de la falla estuvo en Panamá, el segmento más corto de toda la red, por un “disparo de línea” de transmisión de 230 Kv (kilovoltios), debido a lluvias con rayos intensos.
A la hora de la descarga, debido a que Panamá mantenía abierta una línea de transmisión, se produjo un “flujo de potencia” de sur a norte de 350 MW (megavatios) desde el sistema eléctrico panameño hacia el resto del sistema regional, donde provocó “sobrecargas y desconexiones” en los restantes países.
Para González Castellón, luego de un colapso total de un sistema, el proceso de normalización depende de la gravedad de la falla, y en el caso del sábado en Panamá y Costa Rica “las afectaciones fueron totales (y) eso prolongó el tiempo de restablecimiento”.
El apagón afectó todo el territorio costarricense, de 5 millones de habitantes, mientras que en Panamá se desconectaron la capital y las provincias de Panamá Oeste y Colón, dejando a oscuras a 2 millones de pobladores.
Panamá restableció el servicio en tres horas, mientras que en Costa Rica la reconexión fue gradual y se prolongó por cinco horas.
Guatemala, El Salvador y Honduras se salvaron del colapso total debido a un soporte que en años anteriores instaló México por la interconexión que tiene con los tres países.
Guatemala perdió el 25% del fluido eléctrico, 20% El Salvador y Honduras 17%.
El sistema de interconexión eléctrica del istmo que comenzó a operar en 2013 y cerró en 2014 con el último tramo entre Costa Rica y Panamá. Tuvo una inversión de 500 millones de dólares, pero requiere de nuevas inversiones.