Con la reducción en los precios de combustible, Estados Unidos y Canadá están prefiriendo vehículos más grandes, y Fiat Chrysler ha acelerado su distanciamiento de los carros pequeños, hecho que impactará su producción alrededor del mundo.
El director general de Fiat Chrysler Automobiles, Sergio Marchionne, dio adelantos del plan para salir del comercio de autos de tamaño pequeño y mediano en Estados Unidos, y reestructurar las fábricas para que produzcan camionetas tipo pick up y todoterreno.
Seguirán vendiendo carros poderosos, como el Charger, Challenger y 300, y marcas lujosas como Alfa Romeo. También dijo que parte de la producción se moverá a México.
Marchionne dijo que el plan creará más empleos, pero no es claro en dónde estarán esos trabajos.
Antes había comentado que el cambio en el mercado estadounidense a camionetas y todoterrenos es permanente, en parte gracias a los precios de la gasolina.
El mercado “es relativamente sano en áreas en donde trabajamos bien” como Jeep y Ram, señaló. “Se ha complicado mucho más para los autos de pasajeros”, agregó.
Dijo que “la realineación del impacto” aumentará el número de empleos en Estados Unidos y Canadá, pero parte de la producción se irá a México.
Habrá algunos despidos temporales mientras las plantas son reestructuradas para cambiar su producción de autos a camionetas, le dijo a analistas. Marchionne calificó la transición de dolorosa, pero dijo que se lleva a cabo una intensa actividad.
