Exdirector de la Superintendencia de Valores implica a Martinelli y Shamah

Exdirector de la Superintendencia de Valores implica a Martinelli y Shamah


El exdirector de Supervisión de la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV), Ignacio “Nacho” Fábrega, que hoy se declaró culpable de suministrar información confidencial a la casa de valores Financial Pacific (FP), señaló que actuó por instrucciones del expresidente de la República, Ricardo Martinelli, y el exadministrador de la Autoridad de Turismo, Salomón "Salo" Shamah. 

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Fábrega le dijo al tribunal que se reunía con Martinelli y Shamah en la Presidencia de la República. "Le decían que los mantuviera informados y que evitara que la casa de valores fuera nuevamente intervenida", contó Jair Urriola, abogado de la SMV y quien estuvo presente en la audiencia que hoy llevó a cabo el Juzgado Primero Penal, en la que Fábrega se declaró culpable del delito de corrupción de funcionario.

La última de estas reuniones en Presidencia se realizó a principios de 2014, meses antes de las elecciones generales del 4 de mayo. Ahí se le solicitó  que hiciera "lo imposible" para evitar la intervención de FP, lo cual representaría un "escándalo" para el partido gobernante.

Según Urriola, Fábrega declaró que no sabía que, con sus actuaciones, cometía un ilícito y que, en base a la información que manejaba desde su cargo de director de Supervisión, "entendía" que Martinelli y Shamah eran "accionistas" de FP.

El querellado también contó que Juan Manuel Martans, superintendente del Mercado de Valores en aquella época, era conocedor de la situación. Martans replicó que las acusaciones de Fábrega son una "venganza" por haberle denunciado ante el Ministerio Público. Vía telefónica, dijo a La Prensa que espera ser llamado por la Fiscalía Tercera Anticorrupción para dar sus descargos.

Fábrega también se refirió a Alejandro Abood, quien antecedió a Martans en el cargo. Le contó al juez que en una ocasión abordó a Abood para decirle que Martinelli le reprochaba que prácticamente había violado la ley de valores para designarlo como superintendente -al parecer, no tenía la experiencia mínima exigida para ocupar el cargo- y que, aún así, no le había "cumplido" en relación a FP. Y por eso se forzó su salida del puesto, en enero de 2014. Cuando Abood renunció, dijo que recibía amenazas a su vida.

El juez puede ahora compulsar las copias del expediente, para que se investigue a los implicados por Fábrega. En lo que corresponde a Martinelli, éste debe ser procesado por la Corte Suprema, por su condición de diputado del Parlamento Centroamericano (Parlacen).

Martinelli está fuera del país desde el 28 de enero pasado. En cuento a Shamah, no ha sido posible contactarlo para conocer su reacción.

'PERSONA PELIGROSA'

Fábrega compareció por sorpresa ante el Juzgado Primero Penal, donde hoy estaba programada la audiencia preliminar por las irregularidades en Financial Pacific, actualmente en proceso de liquidación. Estuvo asistido por sus abogadas Mónica González e Hilda Bonilla. Con su admisión de culpabilidad, la audiencia preliminar se convirtió en juicio abreviado.

Al terminar el acto, Fábrega se retiró de la sala de audiencia escoltado por agentes, pero sin ser esposado. Fue conducido a la Dirección de Investigación Judicial (DIJ), donde permanecerá detenido.

El exfuncionario enfrenta una pena de cuatro a ocho años de prisión, conforme el Código Penal. Al acogerse a un proceso abreviado, el juez Rolando Quesada Vallespi -que se acogió al término de 30 días máximo para dictar sentencia- tiene la potestad de reconocer una rebaja en la pena.

No obstante, la fiscal Tercera Anticorrupción, Zuleyka Moore, pidió que se le aplicara la pena máxima de ocho años de cárcel, por considerar que se trata de un caso "de alto perfil". En ocasiones anteriores, la fiscal se ha referido al querellado como una "persona peligrosa" que nunca mostró interés en cooperar con la investigación. De hecho, fue citado en numerosas oportunidades antes de ser detenido el 26 de febrero, en unos estacionamientos en La Chorrera.

El exdirectivo se encontraba prófugo desde el 27 de marzo pasado, luego que el Segundo Tribunal Superior de Justicia revocara una decisión del juez Quesada Vallespi del 3 de marzo, que cambió la medida cautelar de detención preventiva de Fábrega por la de impedimento de salida del país y el deber de notificarse cada 15 días.

La detención preventiva había sido dictada por la Fiscalía Tercera Anticorrupción, donde quedó radicada la denuncia que presentó la SMV contra Fábrega en agosto de 2014, al descubrir que éste contactaba a FP para, entre otras cosas, lo siguiente: transmitir las instrucciones dadas por la junta directiva de la entidad; recomendar cómo y cuáles debían ser sus respuestas ante los requerimientos del regulador, y advertir sobre información que era solicitada por el Ministerio Público en algunas investigaciones.

Fábrega se entregó mes y medio después de que el Ministerio Público anunciara que solicitaría su captura con fines de extradición a Interpol, ante la imposibilidad de localizarlo.

'VENGANZA'

Juan Manuel Martans, que fue superintendente de Valores de febrero a diciembre de 2014, le dijo a La Prensa que nunca tuvo conocimiento de la intromisión del Ejecutivo en la investigación de la SMV a Financial Pacific.

"Estoy claro en que esta es una venganza, porque a mi me tocó denunciarlo [a Fábrega]. Jamás le di una orden a él de mandar información confidencial a nadie. Ni nadie del gobierno pasado me llamó para que les diera información o para dar algún visto bueno. Esa es información que él pasó. Esa información se refería a la casa de valores [Financial Pacific] de la administración de los brasileños ", precisó Martans al ser consultado.

 

"Tendré que esperar que el Ministerio Público me llamen para dar mi versión de los hechos. Con mucho gusto colaboraré con las autoridades para lo que ellos quieran. Después procederé a denunciarlo por calumnia e injuria", agregó.

 

Jair Urriola, abogado de la SMV, recordó que recibió poder de Martans para introducir la querella contra Fábrega. "Es claro que esto es una vendetta", opinó.

 

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