A 46 años de cárcel fueron condenados doce miembros de la Policía Nacional y custodios del Centro de Cumplimiento de Tocumen por los delitos de homicidio, tentativa de homicidio y tratos inhumanos en perjuicio de cinco menores de edad que fallecieron durante un incendio el 9 de enero de 2011.
Cada uno de los custodios y policías involucrados en este caso fue condenado a 552 meses (46 años) de presidio.
Durante el juicio se citó un informe del Cuerpo de Bomberos y del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses, en donde se precisa que el hecho se produjo por la introducción de una bomba lacrimógena que prendió un colchón en la celda seis y que los jóvenes no pudieron salir porque estaba cerrada con un candado.
El documento también revela que el día de la tragedia, los jóvenes recibieron golpes, heridas de perdigones y patadas por parte de los policías.
El juicio tuvo como magistrados a María de Lourdes Estrada (quien actuó como sustanciadora), Secundino Mendieta y Adolfo Mejía.
En el juicio la fiscal segunda superior Geomara Guerra de Jones, aseguró que los involucrados ocasionaron el fuego e impidieron que los miembros del Cuerpo de Bomberos de Panamá pudieran sofocar el siniestro a tiempo.