Los primeros informes de antecedentes del atacante que perpetró una masacre que dejó 50 muertos el domingo en una discoteca de Florida, dan cuenta de un hombre violento. El sospechoso es Omar Mateen, de 29 años de edad, un ciudadano estadounidense musulmán de origen afgano.
La policía investiga si tuvo motivaciones terroristas.
Las autoridades estadounidenses intentan precisar si Mateen tuvo vínculos, o si su ataque fue inspirado por el terrorismo islamista. Los medios, que citan fuentes de las fuerzas de seguridad, informaron que llamó al 911 poco antes de la masacre para expresar lealtad al grupo yihadista Estado Islámico.
No obstante, familiares entrevistados dicen que Mateen, que trabajaba como guardia de seguridad, no era demasiado religioso pero tenía puntos de vista homofóbicos y golpeaba regularmente a su exesposa.
En shock, el padre de Mateen, Mir Seddique, dijo que su hijo estaba furioso tras haber visto recientemente a dos homosexuales besándose en una calle de Miami. "Estábamos el centro de Miami, en Bayside, había gente tocando música", contó el padre a NBC. "Y vio entonces a dos hombres besarse frente a su mujer y su hijo y enfureció", dijo Seddique.
El tiroteo, el peor en la historia moderna de Estados Unidos, se produjo en el club Pulse, una conocida discoteca gay de Orlando. "Estamos en shock como todo el país", agregó Seddique. "Esto no tiene nada que ver con la religión".
En otra entrevista, una exesposa del sospechoso contó que lo abandonó en 2011 por temer por su vida; dijo que era violentamente abusivo.
"No era una persona estable", dijo The Washington Post la exesposa, a la que el diario no identifica para resguardar su seguridad. "Me pegaba. Podía llegar a casa y empezar a pegarme solo porque la ropa no estaba lavada o algo por el estilo", contó al Post.
Según el relato de la exesposa, ambos se conocieron en Nueva York, pero en marzo de 2009 se mudaron a Fort Pierce, Florida.
Los padres de la mujer luego la rescataron de la relación, y se divorció, según un documento judicial conocido por la AFP. Lo describió como una "persona privada" pero no particularmente expresiva sobre su fe musulmana. Poseía un revólver de pequeño calibre y trabajaba como guardia de seguridad en un centro de reclusión para delincuentes juveniles.
Según un reporte del sitio web Daily Beast, que cita fuentes del FBI, Mateen fue investigado dos veces por posibles lazos con extremistas en 2013 y 2014, pero nunca fue procesado.
Según el Departamento de Agricultura y Servicios del Consumidor de Florida, la licencia de porte de armas de Mateen expira en septiembre del próximo año.