“Estamos en una guerra contra el terrorismo yijhadista, que amenaza al mundo entero y no solo a Francia, y Francia tiene que responder a la abominación con la determinación fría que requiere”.
Estas palabras del presidente de Francia, François Hollande, representan el espíritu del discurso pronunciado ante el Parlamento, durante el cual aseguró que mantendrá e intensificará la lucha contra el grupo terrorista Estado Islámico, en su tierra y en los países donde viene masacrando a poblaciones enteras, y durante el cual el cual exaltó el espíritu de lucha del pueblo francés y su capacidad de sobreponerse a momentos de dificultad.
El mandatario dijo que el próximo miércoles les hará llegar la solicitud de ampliación del estado de emergencia por tres meses, tal como lo había señalado el fin de semana recién pasado, al tiempo que anunció que el primer ministro, Manuel Valls, presentará una serie de medidas que implicarán una reforma a la Constitución, de forma que la adecuen a las nuevas formas de guerra que deben enfrentar, una que, reconoció, les tomará mucho tiempo acabar.
El sábado pasado, un día después de los ataques en un estadio, restaurantes y una sala de conciertos, que dejaron ese día 129 muertos y al menos 352 heridos, 99 de ellos de gravedad, Valls dijo a sus compatriotas: “Estamos en guerra (...), sí estamos en guerra” y “vamos a actuar y a golpear a ese enemigo” yihadista “para destruirlo”, en Francia, en Europa, en Siria e Irak, agregando que la respuesta será “del mismo nivel que el ataque”.
Hoy, cuando Francia conmemora su segundo día del duelo nacional decretado en honor a las víctimas, y en toda Europa se dedicó un minuto a la memoria de las víctimas, el gobierno sigue buscando al que sería el octavo atacante yihadista, mientras el mandatario afronta las críticas de la derecha, representada por el expresidente Nicolas Sarkozy y Marine Le Pen, quienes han exigido un cambio de timón a la política de seguridad y exterior.
“Nuestra democracia triunfó ante adversarios más temibles que estos cobardes, nuestra república no está al alcance de estos asesinos despreciables”, aseguró Hollande, quien remarcó que los terroristas yihadistas no representan a ninguna civilización y que sus acciones buscan sembrar el miedo para dividirlos y ejercer presión para que dejen de luchar contra el terrorismo en Medio Oriente.
Quienes ordenaron los atentados de París –apuntó el mandatario- tienen que saber que lejos de amainar la determinación de Francia de combatir el terrorismo la acrecientan, y advirtió de que Francia seguirá luchando en África contra Boko Haram, que seguirá ayudando a Irak a reinstaurar su control sobre todo el territorio, y que se mantendrán luchando el Estado Islámico ellos en Siria.
“Siria se convirtió en la fábrica de terroristas más grandes del mundo”, indicó Hollande, y cuestionó que en medio del peligro que esto representa la comunidad internacional se ha mostrado incoherente a la hora de actuar, de tomar decisiones. Incluso, señaló que Europa no puede seguir viviendo con la idea de que las crisis que suceden a su alrededor no tienen que ver con ella, y que una prueba de eso es que la crisis de refugiados a la que se enfrentan desde hace algún tiempo es el resultado de personas que huyen del mismo sistema terrorista de los que París fue víctima estos días.
Alegó que Francia ha pedido desde el principio del conflicto que exista unidad. “Se necesitan más ataques, se necesita más apoyo para los que combaten, en el marco de una gran y única coalición. Es en ese espíritu que en próximos días me reuniré con el presidente [ estadounidense Barack] Obama y el presidente [ruso Vladimir] Putin para unir nuestras fuerzas y lograr un resultado que hasta el momento se ha dejado para mucho después”, aseguró.
Nuevo régimen jurídico
Al explicar la reforma que propondrá a la Carta Magna, Hollande dijo que es necesario adoptar un régimen jurídico completo para cada una de las acciones que propone y los invitó a votar a favor de esos cambios antes del final de la semana.
Tenemos que ir mucho más allá de la urgencia. Tenemos que hacer evolucionar la Constitución para permitir actuar a los poderes públicos en contra del terrorismo de guerra, afirmó, al señalar que los dos regímenes actuales que prevé la norma no están adaptados a la situación que viven actualmente. “Se trata de disponer de una herramienta apropiada para adoptar medidas sin comprometer el ejercicio de las libertades”, alegó.
Entre los aspectos que mencionó de su propuesta se encuentran:
"Y que todo se haga en el marco del respeto a la legislación internacional. Esto será público y yo asumo las consecuencias”, declaró.
"Les pido que reflexionen ante la decisión que he tomado y le pido al primer ministro que prepare esta revisión con ustedes para que pueda ser adoptada lo más rápido posible, porque ustedes van a prolongar el estado de urgencia a tres meses, pero después de esto debemos tener un Estado Derecho que permita luchar contra el terrorismo y la lucha contra el Estado Islámico va a tomar tiempo”, manifestó.
La propuesta de Hollande también contempla que los magistrados puedan acceder a las nuevas herramientas que ofrece la tecnología para perseguir los delitos, para buscar información que pueda limitar el tráfico de armas. Asimismo, analizar las condiciones en las que los agentes que pelean contra los terroristas pueden utilizar sus armas, entre otros aspectos.
Durante su discurso, el presidente francés aludió a que su territorio existen individuos que de la delincuencia pasan a la radicalización y luego a la filosofía terrorista y que lograron evitar algunos de esos ataques en los últimos meses: "Tenemos que defendernos con urgencia y de manera duradera, tiene que ver con nuestra capacidad de defender a nuestros ciudadanos y aprender a vivir juntos. Frente a estos actos de guerra que fueron cometidos en nuestro territorio y que llegan después de los atentados de enero, cometidos en nombre de esta filosofía yihadista, tenemos que ser implacables".
El Parlamento se reunió en sesión bicameral de forma extraordinaria ante la crisis por los atentados. Al culminar su alocución, Hollande fue aplaudido de pie y entonaron la el himno nacional.
(Basado en las traducciones elaboradas por las cadenas de televisión internacionales)