“No hay riqueza, sino vida”, reza un antiguo enunciado que parece cobrar sentido en la naturaleza istmeña.
Así lo corrobora la Lista oficial de aves de Panamá 2016, publicada el pasado mes de febrero por la Sociedad Audubon de Panamá, con un registro total de 1002 especies asentadas en todo el istmo.
El catálogo, disponible en el sitio web de la organización sin fines de lucro, incluye especies registradas hasta febrero de 2016.
A diferencia del estudio efectuado en 2015, que determinaba un total de 997 especies, el nuevo inventario suma 5 nuevos ejemplares avistados en el país.
Rosabel Miró, directora ejecutiva de la Sociedad Audubon de Panamá, confirma que el mirasol pinado (botaurus pinnatus), ibis cariblanco (plegadis chihi), falaropo rojo (phalaropus fulicarius), tórtola turca (streptopelia decaocto) y el heliomaster gorrioscuro (heliomaster constantii) destacan como los nuevos integrantes alados que ingresaron a la contabilidad nacional.
Miró explica que las listas de aves, que se publican cada año desde la década de 1980, son indicadores de la riqueza natural del istmo y la salud de los hábitats que los sostienen.
“Para un país tan pequeño como lo es Panamá, contar con un número importante de aves representa una oportunidad que las autoridades oficiales deberían tomar en cuenta al mercadear el país”, apunta Miró.
Ella destaca actividades turísticas como el aviturismo, que puede ser un incentivo económico sostenible, “que tiene cada vez más demanda entre los turistas, sobre todo de países del centro y norte de Europa”, por ejemplo.
Para la directiva del colectivo conservacionista, la exuberante avifauna de Panamá coloca al istmo como un destino turístico, pero también lo pone a la cabeza entre los países centroamericanos con mayor número de especies de aves reportadas.
En su sitio en internet, la Unión de Ornitólogos de Costa Rica menciona a Panamá como uno de los 10 países latinoamericanos con mayor estudio de aves.
Aunque el país solo tiene el tamaño del estado de Carolina del Sur (Estados Unidos), informa Audubon en su sitio web, su número de aves “supera la lista combinada de especies en Estados Unidos y Canadá”. Y es que el territorio istmeño cuenta con variedades de hábitats que propician el desarrollo de centenares de especies endémicas regionales y locales, así como migratorias.
La Lista de Aves de Panamá 2016 se realizó siguiendo la taxonomía del Check-list of North and Middle American Birds de la Unión de Ornitólogos Americanos (American Ornithologists’ Union), que estudia la avifauna asentada desde el Polo Norte hasta la frontera panameña con Colombia, incluyendo las islas adyacentes.
El proceso para preparar el listado, comenta Miró, incluyó la recopilación de información histórica sobre Panamá y la región.
Las adiciones o cambios en la lista responden principalmente a los reportes de avistadas en el territorio nacional, que luego son evaluados por un comité revisor, bautizado como el Comité de Reportes de Audubon Panamá, conformado por seis científicos y profesionales en identificación de aves que se encargan de tomar decisiones consensuadas sobre la aceptación -o rechazo- de los reportes o evidencias de nuevas aves en el país, agrega Miró.
Las cinco especies que ingresaron al registro de este año son especies que quizás han expandido su rango de distribución y ahora son vistos en Panamá.
El inventario 2016 registra cambios en la taxonomía de algunas especies nacionales y modificaciones en los nombres científicos y género o familia.
El listado de aves que prepara la Sociedad Audubon de Panamá es oficial y es utilizado por observadores de aves, consultores de estudios de impacto ambiental y las autoridades e instituciones públicas.