Un total de 18.4 millones de dólares se invertirá en la construcción de 659 plazas de estacionamientos subterráneos en el distrito capital.
La Alcaldía de Panamá ya licitó y adjudicó el contrato para edificar 309 aparcaderos en el parque Francisco Arias Paredes, entre las avenidas Cuba y Perú, en el corregimiento de Calidonia, y otros 350 debajo del Mercado de Artesanías, en la plaza 5 de Mayo.
Manuel Trute, director de Planificación Urbana de la comuna capitalina, explicó que las obras en el parque Francisco Arias Paredes se iniciaron y están a cargo de la empresa Estacionamientos Unidos, por un monto de 6.9 millones de dólares.
De acuerdo con el contrato, la compañía deberá dar mantenimiento y administrar los aparcaderos por un período de 20 años, una vez comience operaciones.Respecto a los trabajos en la 5 de Mayo, Trute afirmó que la obra la ganó Dynamic 5 S.A., y tendrá un costo aproximado de 11.5 millones de dólares.
En la actualidad se trabaja en la elaboración del estudio de impacto ambiental y se prevé que las obras físicas empiecen en el primer semestre de 2016.
PROPUESTAS, EN MARCHA
La falta de estacionamientos en la urbe ha obligado a que gremios de la sociedad organizada y autoridades busquen nuevas iniciativas para solucionar el problema.
Por ejemplo, en la Asamblea Nacional se han impulsado propuestas con respecto al tema de los aparcaderos.
Entre ellas, el proyecto de Ley No.10 que modifica y adiciona artículos a la Ley No.45 de 2007 sobre protección al consumidor, aprobado por insistencia en tercer debate el pasado mes de septiembre, después de haber sido vetada por el presidente, Juan Carlos Varela, alegando que es inconstitucional.
La iniciativa, presentada por el diputado del Partido Revolucionario Democrático (PRD) Leandro Ávila , establece el uso de los estacionamientos gratuitos durante tres horas en oficinas públicas, centros comerciales y hospitales.
Ávila manifestó que el proyecto está en manos del magistrado de la Corte Suprema de Justicia Jerónimo Mejía, quien debe resolver si es o no inconstitucional.Por otro lado, el también diputado del PRD Iván Picota presentó el proyecto de Ley No. 63 que concede beneficios fiscales a las compañías o personas naturales para impulsar y propiciar la edificación de aparcaderos.
La idea, dice, Picota, “no es perjudicar a nadie, sino buscar solución a un problema que genera cada vez más caos en nuestras ciudades”.
De hecho, estadísticas de la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT) indican que, en 2010, existía un parque de 600 mil automóviles. Hoy esa cantidad llega a 1.2 millones de vehículos, de los cuales, 650 mil están en la provincia de Panamá.
Además, la entidad ha identificado 67 “puntos críticos” en los que se concentra el tráfico vehicular en la ciudad de Panamá.
Rutas troncales como las vías España, Ricardo J. Alfaro (Tumba Muerto), Simón Bolívar (Transístmica), Domingo Díaz (Tocumen), calle 50, avenidas José Agustín Arango, Israel y Balboa son áreas donde se agrava el problema.
Otras propuestas han sido la aprobación del Decreto Ejecutivo No.684 del 22 de octubre de 2015, en el que se modifican los requerimientos de estacionamientos que tendrán las construcciones en Panamá, impulsada por el Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial.
La norma estipula que en los centros comerciales debe haber un estacionamiento por cada 35 metros cuadrados construidos; mientras que en los edificios residenciales de más de 80 metros cuadrados deberán tener 2 y se requerirá que el 10% del total de estacionamientos sea para visitas.
Por su parte, Sandra Escorcia, miembro de la Comisión de Urbanismo de la Sociedad Panameña de Ingenieros y Arquitectos, mencionó que la construcción de carreteras y estacionamientos no garantiza mejores resultados.
Por el contrario, sugirió la búsqueda de métodos sostenibles, como mejorar el sistema de transporte público, eliminando los diablos rojos y reduciendo los cupos de taxis.
Añadió que se debe apostar por la creación de espacios que permitan el desplazamiento del peatón y el uso de las bicicletas.
Señaló que debe haber mayor dinamismo por parte de la ATTT, el Ministerio de Obras Públicas y los gobiernos locales, no solo por la falta de aparcaderos, sino porque se generan otros efectos como el tráfico, la pérdida de tiempo, de dinero y una reducción en la calidad de vida de la ciudadanía.
