Japón conquistó el oro olímpico de gimnasia masculina por equipos en los Juegos de Rio-2016, ocho años después de haberle cedido el dominio a China, campeona en Beijing-2008 y Londres-2012, pero que finalizó tercera la final de este lunes.
La medalla de plata fue para Rusia tras un desenlace vibrante.
El equipo japonés, liderado por el rey de la gimnasia internacional Kohei Uchimura, ya había abierto la senda del triunfo en el Mundial del año pasado, donde se proclamó campeón tras 37 años de sequía.
Después una clasificación por debajo de lo esperado el domingo, en la que el quinteto nipón fue cuarto y estuvo más nervioso e impreciso de lo normal, el grupo se recuperó a tiempo.
Con casi tres puntos de ventaja, 'King Kohei' y los suyos cumplieron con su obsesión de superar a China, a cuyos dos oros consecutivos habían tenido que asistir desde el segundo escalón del podio.
La sorpresa, sin embargo, fue que Rusia se colara en el duelo entre las dos potencias asiáticas, después de no haber logrado una medalla olímpica por equipos desde el bronce de Sídney-2000.
La selección inglesa fue otra de las grandes perjudicadas del cambio de fuerzas en el podio, ya que se quedó a las puertas de revalidar la medalla de bronce que lograron en Londres y fue cuarta, por delante de Estados Unidos.
Pese al vibrante desenlace en el que Rusia llegó a aspirar a todo, Japón contenía una emoción almacenada durante demasiado tiempo y China se deshinchaba, la gran parte de lo que ocurría en el practicable era un asunto brasileño para el público de la Arena Olímpica de Rio.
Clasificado por primera vez para unos Juegos, el equipo masculino del país anfitrión ya logró un éxito sin precedentes al meterse en la final, donde acabó sexto ante un público que no dejó de animarles como a estrellas durante toda la tarde, incluso cuando las medallas comenzaban a quedar demasiado lejos.
La peor suerte la corrieron Alemania y Ucrania, relegadas a las dos últimas plazas de la final.
