Dos meses después de que Colombia prorrogara por dos años la norma que regula la importación de calzados y textiles desde Panamá, el gobierno de Juan Carlos Varela elevó el arancel de importación a 30 productos, medida que encarecerá la entrada de ciertas mercancías colombianas a Panamá.
El 1 de febrero entró a regir una nueva tarifa arancelaria para la importación de flores, café, detergentes, confites, carbón mineral y materiales de construcción, entre otros productos provenientes de países con los que Panamá no tenga tratados de libre comercio vigentes, como Colombia.
La medida, establecida a través del Decreto de Gabinete N°1 del miércoles 10 de enero de 2018 y publicada en Gaceta Oficial N°28445-C, establece que las mercancías originarias de países miembros del Subsistema de Integración Económica Centroamericana, de la Asociación Latinoamericana de Integración (Ecuador, Bolivia y Paraguay), y de la Zona Libre de Colón, quedan excluidas.
Se agudiza así la crisis en la relación de los dos socios comerciales que se inició con la imposición por parte de Colombia de aranceles a calzados y textiles reexportados por Panamá.
La Organización Mundial del Comercio (OMC) ha fallado a favor de Panamá en cuanto al cobro injustificado de aranceles en calzados y textiles.
Néstor González, viceministro de Comercio Exterior, manifestó que el aumento de los aranceles es temporal, hasta el 31 de diciembre de 2018, y manifestó que este “está conforme con la OMC”.
En declaraciones recogidas por el diario colombiano Portafolio, Javier Díaz, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores de Colombia (Analdex), aseguró que “es preocupante el decreto emitido por Panamá y esperamos que los gobiernos de los dos países puedan sentarse y negociar algo que les convenga a las partes. Este no es un problema nuevo, pero con la decisión reciente se acentúan problemas del pasado”.
“Como país, las exportaciones se verían afectadas en un 2%, lo cual no es mucho. Sin embargo, si hacemos el análisis eliminando petróleo y minería, el peso de las ventas al exterior que se verán afectadas se incrementa hasta el 14%, lo cual ya es más relevante”, manifestó el representante de Analdex.
Usha Mayani, presidenta de la Asociación de Usuarios de la Zona Libre de Colón (ZLC), calificó la medida como positiva, porque el Gobierno panameño estaría protegiendo las reexportaciones de Panamá.
Los importadores panameños no se verán afectados, porque la relación diplomática con la República Popular China abre un abanico de oportunidades para comprar mercancía de Asia, que podría reemplazar las compras hechas en Colombia. “Ahora Colombia y China compiten por el mercado de reexportación de Panamá”, comentó Mayani.
Por su parte, Rebeca Perelis, presidenta de Cerro Punta, S.A., descarta un incremento en los costos para el consumidor de las flores importadas.
“Aunque la medida limita las posibilidades de aumentar las ganancias, la industria de la floricultura es muy especial y no se pueden estar subiendo los precios”, asegura Perelis.
En la industria de la floricultura mundial, Colombia es uno de los países más innovadores. “Nosotros seguiremos importando flores de ese destino, porque sus rosas son únicas”, manifestó.
En Panamá, el 60% de las flores que se comercializan proviene de Colombia: el resto se importa de Ecuador, Perú, Estados Unidos y Holanda.