Detrás del movimiento eléctrico en el Hotel Caesar Park de periodistas, funcionarios, agentes de seguridad y personal de apoyo que acompaña desde ayer al presidente George W. Bush en su visita al país, la administración finiquita los últimos detalles de un cambio de dueño.
El enorme contingente estadounidense será uno de los últimos huéspedes de la administración de Nuevos Hoteles, S.A., una franquicia hotelera de capital japonés que desde 1983 representa el Caesar Park.
Desde el año pasado, la administración japonesa se dispuso a abandonar el negocio de la hotelería a nivel mundial y ceder el control accionario del hotel panameño.
Después de evaluar al menos cinco propuestas durante un período de ocho meses desde enero de 2005, la sociedad decidió vender las acciones mayoritarias al grupo Liakópulos, propietario de los restaurantes Niko’s Café. Para adquirir el Caesar Park, los Liakópulos crearon una nueva sociedad a través de la cual firmaron un contrato de compra del 90% de las acciones.
Entre los ofertantes también se encontraba el principal empresario hotelero de Panamá, Herman Bern, como también Giuseppe Iovane, propietario de los restaurantes Napoli, y Noel Riande, dueño de los hoteles Riande.
En la puja y repuja no faltaron las alianzas. La familia Iovane se asoció con la familia Liakópulos para adquirir el 90% de las acciones del Caesar Park, por un valor de unos 25 millones de dólares.
‘Sorprendido’
El anuncio extraoficial de que la venta había concluido tomó completamente por sorpresa a Bern.
"Me he enterado por los medios de comunicación de la venta y no se me ha notificado nada de la transacción", dijo el empresario, quien ha construido y administra una cadena de cinco hoteles, entre ellos el Miramar Intercontinental, Crowne Plaza, Gamboa & Resort, Suites Embassador y el Playa Bonita Resort.
Bern, con un sabor amargo, aseguró haber firmado un contrato de compra del 90% de las acciones del Caesar con Nuevos Hoteles.
"No sé aún qué voy hacer, primero tengo que hablar con mis abogados", agregó Bern.
Nuevos negocios
El proceso de venta del Caesar Park se hizo de forma cerrada y bajo acuerdos de confidencialidad entre las partes.
Los Liakópulos y los Iovane, que incursionan por primera vez en la industria hotelera, no estarán solos en el negocio. Tendrán como socio a la Corporación Financiera Nacional (Cofina) que posee el 10% de las acciones del Caesar Park y mantiene dos demandas en los tribunales de justicia por reclamación de dividendos e intereses dejados de pagar durante varios años.
El abogado de Cofina, Ricardo Landero, dijo que lamentablemente la sociedad administradora no ha cumplido con el pago de los dividendos ni los intereses generados por el 10% de las acciones que mantiene el Estado como codueño del hotel.
La administración del Caesar Park, a cargo de la filipina Margarita García, no ofreció declaraciones y tampoco ha notificado a los empleados sobre el cambio de dueño. Según el secretario general del sindicato de los empleados del hotel, José Diones, García no le ha confirmado ni negado la naturaleza de la transacción.
Una fuente vinculada al grupo Liakópulos dijo que tras la venta, por el momento, no habrá cambios en la administración ni despidos de personal.
"Estamos incursionando en un negocio delicado, especializado", por lo que no se pueden hacer cambios bruscos, y primero hay que ver cómo funciona la administración actual, agregó la fuente.
De continuar el asocio con Cofina, esta no sería la primera vez que los Liakópulos estarían vinculados con los negocios del Estado. Niko’s Café mantiene un contrato para suministrar y distribuir alimentos preparados a la Policía Nacional, por aproximadamente 2 millones de dólares. Este año la empresa perdió un contrato que tenía con el Servicio de Protección Institucional de la Presidencia de la República para el suministro y distribución de alimentos, en un acto de licitación que ganó la empresa Inversiones Jimmy, S.A.
OBSTÁCULOS DE UNA COMPRAVENTA
