Hands of Stone (Mano de Piedra) se estrena mañana 26 de agosto en Estados Unidos y Canadá, junto a otras siete producciones que también aspiran a dominar la taquilla.
Esta película, que tiene al frente a Robert De Niro, Edgar Ramírez y Rubén Blades, forma parte del grupo de filmes de estreno limitado.
Es decir, no estarán en todos los complejos de cine en Norteamérica como sí les pasa a largometrajes como Suicide Squad (4 mil 255 salas) y War Dogs (3 mil 258 salas).
Este drama deportivo, sobre el boxeador panameño Roberto Durán, ni es un título 100% independiente ni es 100% industrial.
Mientras que The Sea of Trees solo logró estar en un puñado de espacios en Nueva York y Los Ángeles, Hands of Stone estará en 2 mil salas en casi toda Norteamérica, aunque el estreno rey será Mechanic: Resurrection con 2 mil 200 salas.
La mayoría de los largometrajes que inician este fin de semana su recorrido son de pequeño y mediano presupuesto (Hands of Stone se realizó con una inversión de 20 millones de dólares de acuerdo al sitio imdb.com), y con un contenido más serio.
Es una señal de que la temporada de verano (la más lucrativa junto a la época de fin de año) terminó y ahora llegan a la cartelera las producciones que aspiran a conquistar a la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood, los responsables del premio Óscar.
EL RESTO DE LOS CONTRINCANTES INDEPENDIENTES
A partir del viernes, en Norteamérica, además de Hands of Stone, también querrán su cuota de éxito otras producciones intermedias como el thriller de misterio Complete Unknown (solo se verá en la Gran Manzana), de Joshua Marston, a quien rodea un cartel de intérpretes respetables como Rachel Weisz y Kathy Bates.
El admirado Gus Van Sant da las órdenes detrás de las cámaras a Matthew McConaughey y Naomi Watts, en el drama The Sea of Trees (se presenta solo en salas de Los Ángeles y Nueva York).
Mientras que Nanni Moretti dirige y protagoniza el drama italiano Mia madre (2015), quien tiene en su reparto a Margherita Buy y John Turturro (quien también participa en Hands of Stone).
A este colectivo se les une The Hollars, comedia dramática de John Krasinski y lo acompañan los actores Richard Jenkins y Anna Kendrick.
The Intervention es una fusión ente comedia y drama, dirigida por Clea DuVall y la parte actoral corre por cuenta de Melanie Lynskey y Jason Ritter.
En In Order of Disappearance (2014) combina el thriller con la acción. Su director es Hans Petter Moland y sus estrellas son Stellan Skarsgård y Bruno Ganz.
RIVALES INDUSTRIALES
Del lado de las producciones industriales, las que quizás sean las que tengan más oportunidades de capturar a los espectadores norteamericanos, porque tienen más dinero para promocionarse, destaca Mechanic: Resurrection, un thriller criminal de Dennis Gansel y protagonizada por caras conocidas como Jason Statham, Jessica Alba y Tommy Lee Jones.
También promete mucha acción y balas a granel es Blood Father, de Jean-François Richet y su estelar es un Mel Gibson que desea recuperar su antigua condición de astro.
Para los amantes del terror también llegará a la cartelera Dont't Breathe, de Fede Alvarez y su elenco lo integran Stephen Lang, Jane Levy y Dylan Minnette.
POR AHORA, UN FRÍO RECIBIMIENTO POR PARTE DE LOS CRÍTICOS
Por el momento, ha sido frío el recibimiento por parte de los críticos de cine a Hands of Stone.
Los primeros comentarios en torno a Hands of Stone (Panamá\Estados Unidos), proyectada fuera de concurso en el Festival Internacional de Cine de Cannes, no son tan positivas.
De acuerdo al sitio web rottentomatoes.com, que reúne las críticas de cine, principalmente publicadas en Norteamérica e Inglaterra, le ha puesto un 45% de un total de 100% a esta producción distribuida por The Weinstein Company.
Aunque la página electrónica solo ha reproducido, hasta ayer jueves, 14 críticas, lastimosamente es casi imposible que esta producción, rodada mayoritariamente en el istmo, pase de una F menos a una A.
El crítico Steve Pond, del sitio web The Wrap, escribió que era “una buena fiesta para el actor Robert De Niro, pero una películade boxeo rutinaria (...) Los resultados no son tan fabulosos como sus elementos prometían”.
Mientras que su colega Leslie Felperin, de la revista The Hollywood Reporter, señaló que si “hubiera un ring virtual en el que combatieran las películas de boxeo, y Hands of the Stone y Creed (2015, de Ryan Coogler) se enfrentaran la una a la otra como pesos medios, Creed probablemente ganaría por puntos... pero no por un gran margen”.
Jordan Hoffman, de The Guardian, la calificó “de sutil como un golpe en la cabeza” . Consideró que era “un fracaso” si la intención de la Comisión de Cine de Panamá quería convertir a Hands of Stone en un vehículo para aumentar el turismo nacional, ya que “la película se las arregla para hacer de Panamá un lugar sucio que nadie querrá visitar”.
Owen Gleiberman, de la revista Variety, indicó que Hands of Stone “cumple con su trabajo, pero es difícil no tener la sensación de estar viendo una película de boxeo tópica y bastante genérica. Es totalmente competente, pero hace que la historia de Roberto Durán parezca un poco: ‘¿y qué?”.
Brian Truitt, del periódico USA Today, resalta que el personaje de Robert De Niro (el entrenador Ray Arcel) tiene demasiadas subtramas; que Usher Raymond (encarna a Sugar Ray Leonard) tiene un mejor desempeño en la gran pantalla que Edgar Ramírez (Roberto Durán); que Creed supera a Hands of Stone, y que en términos argumentales el ritmo de la película solo sube cuando se registran los dos legendarios combates entre Leonard y Durán.
La periodista Lindsey Bahr (de la agencia de noticias internacionales AP) dijo: “Una buena película apta para adolescentes y adultos. Sin embargo, es inevitable sentir que ya hemos visto películas iguales”.