Decuria Group es un holding inmobiliario internacional con más de 40 años de experiencia en el desarrollo y construcción residencial turística y hotelera. Durante los últimos años y a raíz de un grave conflicto legal con The Bank of Nova Scotia (SCOTIABANK), el Grupo ha sido víctima de abusos de poder, desequilibrios legales y falta de transparencia por parte de las instituciones panameñas ligadas a la corrupción, generando una profunda inseguridad jurídica.
Somos testigos de la impunidad que goza una gran institución financiera como Scotiabank que, pese a la evidente comisión de hechos típicos de delitos de estafa agravada, extorsión y asociación ilícita para delinquir, es capaz de salir indemne a través de prácticas y abusos de la condición de poder, orquestados por sus directivos y por las grandes firmas de abogados vinculadas a todas las acciones judiciales interpuestas contra el banco.
Los hechos no sólo afectan a las sociedades del Grupo Decuria, sino también a más de una veintena de familias e inversionistas que confiaron en nuestra empresa y en los sistemas fiduciarios y bancarios, no pudiendo obtener los títulos de propiedad de sus inversiones por razones únicamente imputables al Banco. La desconfianza fue salpicando y expandiéndose a otras empresas, inversionistas y fondos de inversión extranjera vinculados al Grupo, que frenaron y congelaron sus millonarias inversiones al percibir que el caso pudo haber sido tapado y teñido de corrupción tanto en el Sistema de Justicia, la Superintendencia de Bancos de Panamá o el Ministerio Público.
Toda la documentación fue presentada y analizada por parte de firmas auditoras internacionales como es Berkeley Research Group, así como por otros expertos y reconocidos juristas y financieros nacionales que, frente a la abundante batería de pruebas y evidencias, encuentran inverosímil la actuación del sistema Judicial en Panamá.
Llamamos la atención de la ciudadanía, para que vigile y proteja la imagen de las Instituciones sobre las actuaciones corruptas de ciertos funcionarios públicos, sometidos al abuso de poder de las entidades bancarias junto a la intervención de letrados que tratan de manipular el sistema a su conveniencia.
Esperamos que Panamá pueda ofrecer garantías de derecho en nuestro proceso, iniciando con la Audiencia que se celebrará el 15 de febrero (Ciudad de Panamá, Plaza Ágora, sala #12, 8:30am), entre Inversiones Decuria S.A. contra The Bank of Nova Scotia (SCOTIABANK) y sus directivos, transmitiendo la confianza necesaria para volver a atraer la inversión extranjera al país, siendo tan necesaria para la Reactivación Económica que tanto demanda la sociedad.
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