FARÁNDULA. La cantante inglesa de pop Lily Allen está en un hospital, donde recibe tratamiento para combatir una septicemia días después de que sufriera su segundo aborto espontáneo, informó su representante.
Allen, de 25 años, está respondiendo bien a los cuidados médicos que le proporcionan en el centro hospitalario, del que no se detalló su nombre.
La artista se encontraba en el sexto mes de gestación, cuando a comienzos de esta semana perdió al bebé que esperaba fruto de su relación con el empresario Sam Cooper.
