Procedente de Margarita y Bayano (cerca de Chepo), medio centenar de niños se reunió este verano para participar en talleres artísticos, promovidos por los artistas panameños Irene Delgado y Rubén Contreras.
“Se puede ver que hay mucho interés en los niños por participar en eventos culturales como este; se unen a las actividades solos, sin que se les invite”, cuenta Contreras.
En la actividad, que culminó la semana pasada, estuvieron aproximadamente 50 niños que, según Contreras, “venían a la comunidad desde temprano para pintar y dibujar, acompañados de una relajante brisa. Todo no está perdido en la juventud”, cuenta. Según dice, se puede ver “que hay deseo de aprender, comunicarse y de valorar la vida y naturaleza”.
La actividad, además del taller, incluyó un proyecto de murales en distintas escuelas de las comunidades. Los niños dieron rienda suelta a su imaginación, realizando un homenaje a la naturaleza y a la cultura de la región.
“Hay mucho potencial en estos niños que se echa a perder por la falta de interés en llevar actividades culturales a áreas como esta”, afirma Contreras. “Es triste que no se realicen estas actividades con mayor frecuencia”, dice.
“No puede existir una sociedad sin cultura”, lo apoya el sociólogo Marco Gandásegui. “Es tan intrínseco tanto para la sociedad como el corazón para la persona”. Según Gandásegui, “el artista es parte fundamental de la sociedad, “son uno de los distintos transmisores de la cultura e historia de sus sociedades y, además, el artista expresa por medio de su trabajo los sentimientos del colectivo”.

