Un equipo internacional, que trabaja en el mayor estudio hasta la fecha para detectar relaciones entre el ADN y la diabetes tipo 2, halló 12 nuevas asociaciones genéticas, que ofrecen claves importantes acerca del funcionamiento de la enfermedad crónica.
Los investigadores de Europa, Estados Unidos y Canadá informaron que sus resultados no solo mejorarán el conocimiento sobre las causas de la diabetes tipo 2, sino que sugieren procesos biológicos que pueden ser explorados como posibles blancos para desarrollar nuevos medicamentos.
“Las señales que identificamos nos ofrecen claves importantes acerca de la base biológica de la diabetes tipo 2. El desafío será convertir estos resultados genéticos en mejores alternativas para tratar y prevenir la condición”, dijo Mark McCarthy, del centro de genética humana de la Oxford University, que lideró el estudio.
La enfermedad es causada por la incapacidad del cuerpo de usar adecuadamente la insulina, una hormona producida por el páncreas para controlar la glucosa proveniente de la comida. Los niveles de azúcar pueden subir y dañar los ojos, los riñones, los nervios, el corazón y las principales arterias.
El equipo internacional, cuyo trabajo fue publicado en la revista Nature, dijo que los genes que encontraron tienden a estar involucrados en el funcionamiento de las células pancreáticas que producen insulina y en el control de la acción de la hormona en el cuerpo.
