Es posible que el café tenga más beneficios para la salud de sus consumidores que lo que usualmente se cree en cuanto a esta popular bebida.
De acuerdo a un estudio, realizado por la escuela de medicina de Harvard hace 24 años, el café parece tener propiedades anticancerígenas, específicamente en lo que respecta al cáncer de hígado y, en menor medida, el cáncer de mama y el cáncer rectal.
Además, su estudio revela que la posibilidad de diabetes tipo 2 desciende 50% en aquellos que lo consumen con mayor frecuencia. El café también parece proteger contra la enfermedad de Parkinson, aunque esta última aplica exclusivamente en hombres, no en mujeres.
Sin embargo, “todo esto sigue siendo de carácter especulativo”, dice la enfermera Ismenia B. Fitzgerald. “Ninguna de estas conclusiones es completamente segura. Tendría sentido considerando que el café es un estimulante, lo cual explicaría por qué podría bajar el riesgo de Parkinson y la posibilidad de cáncer. El café es un fuerte estimulante, razón por la cual una gran cantidad de personas acompañan su desayuno con una taza de esta bebida”.
“El café causa diuresis”, dice Fitzgerald: “esto es bueno en dosis pequeñas, pero puede volverse peligroso si se toma en exceso”.
El café, según la odontóloga Ana Victoria Selles de Sánchez, mancha los dientes. “No es que el café sea malo, pero sí puede ser detrimento en cantidades exageradas. Las manchas que se forman en los dientes pueden llevar al acumulamiento de caries”.
Nada es seguro en cuanto a estos descubrimientos: “es claro que el café no es para todos”, dice Sid Kirchheimer de la página de internet webMD, “pero los estudios más recientes no encuentran ningún efecto adverso significativo”.