Dos clases de actividades



Muy diferentes, sí, son las dos clases de actividades que a su vez grupos diferentes de personas están efectuando en nuestras fotografías de hoy.

En la una no cabe la menor duda que se trata de estudiantes del sexo femenino que forman dos círculos de diferentes tamaños alrededor de los cuales pareciera que giraran, mientras es muy posible que cantaran además.

Por el uniforme que llevan no nos parece que pertenecieran ni a la Escuela Profesional, ni a la Normal de Señoritas. Pensamos —y ojalá demos en el clavo— que se trata de un colegio privado y casi de seguro de religiosas, aun cuando no apareciera ninguna de ellas vigilándolas. Y eso que la reja es grande y no estaba cerrada. Aquí tenemos pues otro acertijo de los que nos encantan a fin de que los lectores con sus experiencias, puedan participar.

La otra fotografía sí que no presenta dificultades para su total descripción, además que ya lo dijimos, se trata de familiares que han llevado a sus cercanos miembros, a fin de que recibiesen alimentos o medicamento, o que los pudieran atender, ya que allí quedaba en sus tiempos la Cruz Roja Nacional.

Uno de los primeros lugares, sino el primero, que fuera ocupado por la recién fundada institución (en esos tiempos) fue uno de los bonitos edificios (fueron dos) que fueron construidos en 1915 ó 16 con motivo de la Exposición Internacional de Comercio en lo que hoy es el barrio de La Exposición. El uno estaba destinado a alojar oficinas gubernamentales y el otro para un palacio de bellas artes.

Hoy están ocupados por la Gobernación de la provincia y el otro no tenemos mucho tampoco que hacer por allí— por la Procuraduría de la Administración (¿sí?).

La Cruz Roja Nacional de seguro que es de todos sabido fue fundada en 1917 y para los pocos que lo desconocen por Matilde Obarrio de Maillet.

El nacimiento de la Cruz Roja Nacional no se debió —como lo fue en Suiza, el país donde se originó— al objetivo de ayudar a heridos y prisioneros de guerra que el suizo Henry Durant vio sufrir y sin ninguna clase de efectivas ayudas durante la violenta batalla de Solferino librada en 24 de junio de 1859. Durant era banquero, mas quedó tan impresionado por los cuadros que allí vio que organizó varias reuniones, primero en su país y luego internacionales. De ellas surgió la Cruz Roja, la humanitaria organización que nos ocupa hoy.

Pero aquí en Panamá, el origen de la Cruz Roja con mayores detalles, fue muy diferente. Recién terminadas las obras del Canal por los estadounidenses, estos quedaron encargados del control sanitario de Panamá, Colón y alrededores. La población prestaba poca ayuda. Se le ocurrió entonces al coronel Deane C. Howard, jefe de la sanidad local, pedirle ayuda a la señora de Maillet, para que visitara los hogares a fin de lograr mayor cooperación.

Ella a su vez, habló con el presidente de la República de turno, Ramón Maximiliano Valdés, quien presentó una ley ante la Asamblea Nacional con el fin de fundar la institución.

Desde entonces la Cruz Roja Panameña es institución que por sus favorables efectos es digna de imitar.

Textos: Harry Castro StanziolaFotografías: Ricardo López Arias

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