El futuro del delantero panameño Nicolás Muñoz en el fútbol salvadoreño quedó pendiendo de un hilo, luego que el técnico del Isidro Metapán, equipo con el que supuestamente jugaría, no lo tiene en sus planes.
Jorge Rodríguez entrenador del bicampeón del balompié salvadoreño, confirmó que no está contando con el panameño y expresó que si la directiva lo contrata él se va.
“Hemos hecho bien las cosas y la verdad no veo necesaria la llegada de Muñoz. Se ha dicho que el alcalde (Juan Samayoa, directivo del equipo) podría ficharlo, pero he sido claro con la directiva, en que si él (Muñoz) vuelve, entonces yo tomaré mi camino. Quiero que se respete mi decisión”, es lo que cita el periódico salvadoreño El Gráfico en su edición de hoy.
Yuyu Muñoz se trasladaría hoy a El Salvador para reunirse con la directiva del Metapán para definir su situación, aunque no se contaba con esta posición del técnico Rodríguez.
El panorama se complica para el campeón goleador del torneo pasado, porque la otra oferta que tenía es del Club Deportivo Águila, que ahora es dirigido por el también panameño Julio Dely Valdés.
Cuando se oficializó la designación de Dely Valdés, el técnico dijo que Muñoz no estaba en los planes inmediatos porque su trabajo empezaba el lunes 5 de enero y el delantero llegaría a El Salvador un día después.
Incluso Dely Valdés comentó que le sugirió a la directiva del CD Águila que se contrate al atacante panameño Yairo Yau.
De acuerdo con el reporte de El Gráfico, el técnico Jorge Rodríguez comentó que “pasaron algunas cosas complicadas” y que había tomado su decisión.
El medio también logró contactar al panameño Muñoz, quien comentó que esperaba resolver su situación cuando llegaba y que tenía otras propuestas.
“Gracias a Dios he tenido propuestas del FAS, Águila y Alianza, con lo que se valora mi trabajo”, fue lo que dijo el jugador según el diario.
Al mismo tiempo, el medio salvadoreño contactó a fuentes de esos clubes y dos dijeron que era poco probable contratarlo.
El que dejó una puerta más abierta fue Dely Valdés: “Vamos a esperar qué pasa. Si bien, pues bien”.

