Yurberjen Martínez aseguró este viernes al menos una medalla de plata inédita para Colombia en el boxeo olímpico, al derrotar al favorito cubano Joahnys Argilagos en las semifinales del peso minimosca en Río de Janeiro.
Contra todos los pronósticos, el Tremendo Martínez se impuso por decisión dividida de los jueces. El colombiano se medirá en la final del domingo al uzbeko Hasanboy Dusmatov, que en la otra semifinal dejó en el camino al estadounidense Nico Hernández.
De 24 años y de un hogar humilde de la zona fronteriza de Urabá, Martínez sorteó los peligros que suponen crecer en una región conocida por la presencia de grupos armados irregulares y lograr hacer una carrera en el pugilismo olímpico.
El muchacho de tez morena no estaba entre los favoritos de los cinco púgiles que trajo Colombia a Río. Pero desde que debutó dejó en claro que venía por algo grande, a juzgar por la entereza, concentración y actitud agresiva mostrada en el ring desde el primer campanazo.
Martínez ya se mete en una página privilegiada del deporte de Colombia, pues hasta el momento el país cafetero solo había conseguido el bronce en el boxeo olímpico.

