Recuperado de la lesión que lo alejó de las canchas, el defensor panameño Andrés Andrade expresó lo feliz que se siente volver a jugar con el LASK de Austria y cómo fue su recuperación de la rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha.
Andrade volvió a disputar su primer partido oficial el pasado 29 de marzo, en el que anotó un gol en el triunfo 2-0 sobre el Rheindorf Altach, en la jornada 23 de la Bundesliga de Austria.
Este defensor, de 26 años, sufrió la lesión en mayo del año pasado, en la victoria de La Roja 2-0 sobre la selección de Galicia, en el estadio de Balaídos.
“Bueno, para ser sincero, estoy muy contento. Estoy muy contento de estar de vuelta y poder ayudar de nuevo al equipo. Creo que lo más importante para mí ahora mismo es seguir apoyando al equipo. Estoy intentando adaptarme al ritmo de juego que quiere el entrenador”, expresó Andrade en una entrevista que le hizo el club.
“Me siento muy bien. Creo que he tenido una rehabilitación muy sólida con los fisioterapeutas. Mentalmente, también me siento muy fuerte, sobre todo porque remonté y marqué fuera de casa. Mentiría si dijera que me lo esperaba, pero quiero seguir adelante y creo que estoy haciendo un buen partido”, agregó.
Andrade, que está en su segunda etapa con el LASK, comentó que fue muy duro no poder entrenar y jugar con sus compañeros, ya que siempre tuvo la sensación de estar ahí y apoyarlos.
“Ahora he vuelto. No tengo palabras para describirlo. Ahora mismo, solo quiero centrarme en ayudar al equipo, darlo todo y ganar tantos partidos como sea posible”, señaló Andrade, quien recordó su retorno al Raiffeisen Arena, en la semifinal de Copa.
“Fue increíble para mí. Sentí muchas emociones encontradas, porque hacía mucho tiempo que no jugaba frente a nuestra afición en el Raiffeisen Arena. Desde el primer minuto hasta el último, sentí el apoyo”, añadió.
El zaguero istmeño comentó que encontró en su esposa, su madre y su familia la fortaleza para seguir adelante y recuperarse de la lesión.
“Mentalmente, al principio, no me encontraba bien, y fue precisamente entonces cuando más me ayudaron. Fueron, sin duda, un gran apoyo. Sin ellos, no habría logrado el regreso que logré”, reconoció Andrade, quien también considera que aprendió muchas lecciones de esta lesión.
“Pero lo que sí puedo decir es que nunca me rendiré. Es algo que realmente aprendí, y ahora intento motivar a otros que están pasando por lesiones similares. Quiero decirles que mantengan una actitud positiva, una mentalidad fuerte y sigan adelante a pesar de los contratiempos”.
De igual forma, Andrade comentó que en su retorno uno de sus objetivos es ganar un título con el LASK y dar un salto importante a una Liga de Europa.
“Quiero lograr algo grande con mi equipo y no quiero irme del LASK sin haber ganado nada. Otro objetivo sería dar el salto a una de las mejores ligas de Europa, y quiero enorgullecer a mi país”, finalizó.


