El Barcelona quedó apeado de la Champions el miércoles, pero la buena imagen mostrada ante el París Saint-Germain, permite creer en un equipo “renovado y con talento”, que mira a Messi con la esperanza de que siga al frente de la nave.
“Con Honor”, titularon este jueves en primera los deportivos catalanes Mundo Deportivo y Sport sobre una foto de Leo Messi tirando un penalti que falló y que pudo cambiar el rumbo del partido.
De no haberse topado con un estelar Keylor Navas, el astro argentino podría haber puesto un 2-1 al descanso y cambiar la cara a un partido de vuelta de octavos de Champions que finalizó 1-1 y con el PSG en cuartos.
Un PSG que sufrió ante un imponente Barcelona, que en apenas dos meses ha pasado de estar desahuciado a competir por LaLiga y la Copa del Rey, y abandonar la Champions con honores, condenado por el 4-1 sufrido en la ida.
“Tenemos equipo”
“Tenemos equipo, ha sido un orgullo, hemos defendido nuestra dignidad, hemos merecido ganar y hemos merecido pasar”, dijo a Sport tras el partido en París, el recién elegido presidente del Barça, Joan Laporta.
Su llegada a la presidencia es la última pieza que faltaba para dar estabilidad institucional a un Barça, que en lo deportivo está mostrando un gran crecimiento desde principios de 2021 mezclando veteranía con talento joven.
“Está construyendo un equipo renovado y con talento que sabe jugar muy bien a fútbol. Este Barça, aún imperfecto, llamará a la puerta de los ‘grandes’”, escribió este jueves el director adjunto de Mundo Deportivo, Josep M. Artells.
El técnico Ronald Koeman tomó un equipo en declive para montar un proyecto en ascenso en el que, entre otros, la frescura de Frenkie de Jong combina con la solidez de Sergio Busquets en el centro del campo para manejar el balón.
Por delante, el talentoso Pedri, de 18 años, ha sabido conectar a la perfección con Messi, mariscal incontestable del equipo, mientras por la izquierda, Ousmane Dembélé pone el desborde en sus, tal vez, mejores actuaciones desde que fichó por el Barça en 2017.
Todo ello se traduce en que el Barça solo ha perdido tres de los veinte encuentros oficiales que ha disputado desde el inicio de 2021.


