Hablar de Julio Osorio Quintana es citar a uno de los más grandes jugadores de baloncesto que ha dado Panamá. Él era todo un ejemplo de patriotismo y pundonor deportivo.
La tarde del pasado miércoles, Quintana falleció a los 82 años de edad, tras batallar con una enfermedad que le robó el existir, pero no podrá borrar el legado que dejó a las nuevas generaciones que practican este deporte.
Osorio no solo fue miembro de aquel glorioso equipo de baloncesto que representó a Panamá en las Olimpiadas de México 68, sino que además tuvo el honor de liderar como capitán el que hasta ahora ha sido el único equipo de conjunto que ha representado a este país en unos juegos olímpicos.
Davis Peralta Jr., quien también fue parte de aquel equipo en esa olimpiada, no pudo contener las lágrimas al hablar de Osorio, quien aparte de compañero en muchos eventos deportivos, también fue su tío político.
“Él fue un ejemplo no solo para mí, sino para muchas generaciones y pienso que los gobiernos quedaron en deuda con él”, señaló Peralta a La Prensa.
“Siempre conversaba con él y me decía que ya los jugadores no juegan por el país, sino por dinero y que para él era triste que ni el himno de nuestro país se saben”, agregó Peralta.
De aquel equipo olímpico ya han fallecido Pedro Rivas, Francisco Checa, Calixto Malcom, Ramón Reyes y ahora Osorio. Sobreviven otros ocho integrantes.
