Después de cinco meses sin entrenar, la selección de fútbol de Panamá volvió este lunes a sus entrenamientos en la denominada burbuja de Coclé.
El trabajo, el primero desde que la pandemia paralizó toda actividad futbolística en el mes de marzo, consistió en un trabajo inicial de activación muscular en las instalaciones del Buenaventura Pacific Sports Center.
Seguidamente los jugadores tuvieron su tan esperado contacto con el balón en unos ejercicios en espacios reducidos.
Los ejercicios arrancaron a eso de las 5:00 p.m y tuvieron una duración de alrededor de una hora y media, según informaciones proporcionadas por la Federación Panameña de Fútbol.
Se espera que los llamados por el nuevo entrenador Thomas Christiansen continúen este martes con el segundo día de entrenamientos en la provincia de Coclé.
El estratega europeo, que este lunes cumplió con sus dos semanas de cuarentena, había llamado a un total de 31 jugadores, que se concentraron el pasado fin de semana en un hotel de la capital, pero solo unos 24 estuvieron presente este lunes en el primer día de trabajo en el Buenaventura.
Los convocados viajaron esta mañana en dos autobuses desde la capital rumbo y se espera que se mantengan entrenando en la denominada burbuja por un espacio de 40 días.
Christiansen lideró los primeros trabajos en compañía de su asistente y también técnico de la selección Sub-20 de Panamá, el uruguayo Saúl Maldonado.
El onceno nacional contará con el preparador físico Gustavo Avendaño como el encargado de trabajar en la parte física de los jugadores. Avendaño viene de trabajar junto a Maldonado en el Tauro FC.
El grupo se mantendrá trabajando en la provincia de Coclé hasta el inicio del mes de octubre cuando arranque la primera ronda de las eliminatorias de la Concacaf.
Recordemos que la selección de Panamá tiene programado debutar en el grupo D como local frente a Barbados, el próximo 8 de octubre, y luego jugará su segundo partido ante Dominica, el próximo 11 de octubre como visitante.