Nadia Comaneci, ganadora de nueve medallas olímpicas y puntuada con los primeros dieces de la historia de la gimnasia, en Montreal 1976, declaró a EFE que Simon Biles es “sin duda, la actual abanderada de la gimnasia mundial”, como lo fue ella hace varias décadas, pero opinó que no sabe quién llegará más lejos, si la estadounidense o la brasileña Rebeca Andrade, ambas medallistas en los Juegos de París.
Comaneci (Onesti, Rumania; 1971) no olvidará nunca aquel 18 de julio de 1976, cuando consiguió una histórica puntuación de diez en los Juegos de Montreal que la sirvió para entrar en el álbum histórico del deporte mundial.
La gimnasia es el deporte sobre el que ha girado su vida y que en la actualidad también rige parte de su día a día con una escuela en Oklahoma (Estados Unidos), dónde vive con el exgimnasta estadounidense Bart Conner, con el que tiene un hijo, Dylan Paul, de 18 años.
Como embajadora de la Fundación Sanitas ha pasado por Madrid, dónde se han celebrado los II Juegos Inclusivos entre deportistas con y sin discapacidad. “Ha sido un honor conocer a Teresa Perales y ver la fuerza y la determinación que tiene”.
¿Cómo vio ese bonito duelo en los Juegos Olímpicos de París entre Simone Biles y Rebeca Andrade?
Los Juegos fueron un duelo total entre las dos. Son dos gimnastas diferentes. Una con mucha fortaleza y mucha técnica y la otra más diva, con más habilidades artísticas. Estuve hace diez días en Sao Paulo con Rebeca, estuve hablando con ella, y me parece una gran deportista. No sé cuál de las dos llegará más lejos.
¿Ha devuelto Simone Biles el esplendor a la gimnasia que quizá se había perdido?
Es, sin duda, la gimnasta de referencia en la actualidad. Hace unos años era yo. Cada quince años más o menos aparece una nueva generación que representa un estilo totalmente al anterior y Biles es ahora la abanderada a nivel mundial.
¿Cómo se aprende a gestionar el aspecto mental en una deportista de élite, sobre todo cuando es tan joven?
La presión es algo que siempre ha existido pero ahora se habla más de ello y tiene un nombre. Hay especialistas y es más fácil de gestionar y manejar. Hay que estar en sintonía entre el cuerpo y la mente porque así lograrás el éxito. Yo me tuve que acostumbrar desde muy pequeña a la presión y a todo lo que conlleva la alta competición.
Cuando se habla de Nadia Comaneci la gente utiliza los calificativos de leyenda o mito. ¿Se siente así?
No me gusta hablar de mi pero es cierto que mucha gente, incluso la que no me vio competir, me felicita y me declara su admiración cuando me ve. Que me tengan en cuenta y hablen bien de mi es muy bonito. Y servir de inspiración y que me tengan como referente es algo muy especial.
¿Ahora como es su día a día en Oklahoma?
Sigo haciendo deporte. Voy al gimnasio todos los días y me podéis seguir en Instagram para comprobarlo (risas). Tengo una escuela en Oklahoma con más de mil estudiantes y sigo enseñando y apoyando la gimnasia como puedo por todos los sitios dónde voy.