En la madrugada de este miércoles 17 de noviembre, el futbolista Cristian Martínez y su pareja fueron conducidos por la Policía Nacional a una casa de justicia comunitaria del Tercer Distrito de Panamá, por presuntamente alterar la convivencia pacífica.
El incidente ocurrió poco después del triunfo de la Selección Nacional de Fútbol, en un partido ante El Salvador, en el estadio Rommel Fernández, la noche del martes 16 de noviembre. Martínez jugó en el segundo tiempo del partido.
De acuerdo con los informes preliminares, agentes de la Unidad Preventiva Comunitaria de la Policía Nacional recibieron reportes de que en la calle 25 de El Chorrillo se realizaba un “parking”.
Según la versión de los agentes, Martínez y su acompañante supuestamente empezaron a gritarle improperios a los policías, razón que motivó su traslado ante el juez.#LaPrensaSecuestrada https://t.co/gNGJptG4f9 pic.twitter.com/vRdVD38BVm
— La Prensa Panamá (@prensacom) November 17, 2021
Los agentes llegaron al sector por las denuncias de unas detonaciones con armas de fuego; en ese momento, del lugar salió un vehículo, el cual fue interceptado por los agentes.
Según la versión de los agentes, Martínez y su acompañante supuestamente empezaron a gritar improperios a los policías, por lo que fueron conducidos a la casa de justicia comunitaria.
Ante el juez de justicia comunitaria, los agentes policiales y la pareja conducida expresaron su deseo de desistir del proceso. No se sabe por qué razón.
La pareja se comprometió con el juez a no emprender acciones por el incidente con la Policía.
En la tarde de este miércoles Martínez fue recibido por el director de la Policía Nacional, John Dornheim, en la sede de la entidad en Ancón.
Dornheim le expresó a Martínez que esa era la casa de la Federación Panameña de Fútbol y de todos los futbolistas.