Thomas Christiansen no se guardó nada a la hora de hablar de los temas de actualidad en el mundo del fútbol. En esta segunda entrega exclusiva con La Prensa, Christiansen aborda desde el clásico español hasta la reciente entrega del Balón de Oro 2024, pasando por cambios en su cuerpo técnico.
En cuanto a la selección del Balón de Oro, Christiansen expresó su preferencia por el mediocampista del Manchester City, Rodri, destacando el valor que tienen los jugadores en esa posición para cualquier equipo. Asimismo, apuntó a que el comportamiento en el campo también cuenta al momento de elegir al ganador del premio.
“Rodri ha hecho muchas cosas buenas para merecerse el Balón de Oro. Sí que hay polémica con Vinicius. Uno de los criterios es el fair play, que deja mucho que desear, pero Rodri merece el reconocimiento. Un Balón de Oro para un mediocampista o defensa, como ocurrió con (Fabio) Cannavaro, es una señal de que esas posiciones son importantes. Ha sido merecido; ha sido clave para su equipo”, comentó Christiansen.
Sobre el clásico español, en el que el Barcelona derrotó al Real Madrid con un contundente 0-4 en el Santiago Bernabéu, Christiansen valoró el coraje y la energía juvenil que desplegó el Barça, en especial en la segunda mitad.
“Fue un buen partido, sobre todo el segundo tiempo, con un Barcelona muy atrevido, subiendo la línea defensiva, lo mismo que hicieron con el Bayern. Me gusta ver a esa juventud pisando fuerte. Hansi Flick no ha tenido miedo en poner a jugadores jóvenes. Ahí se ve la Masía, la formación. Vi una foto de Pau Cubarsí y Lamine Yamal a los 10 años; ahora tienen 17. Llevan 7 años formándose, y cuando llegan al primer equipo ya saben lo que tienen que hacer”, resaltó.
Por otro lado, Christiansen se refirió a la salida de Guillem Escriú, quien, tras varios años en el cuerpo técnico de Panamá, se unió al Barcelona como analista de videos. Aunque fue una pérdida significativa para el equipo, el entrenador se mostró comprensivo con la decisión de Escriú.
“Fue duro para nosotros digerirlo porque vino de un día para otro, antes de la Copa América. Pero yo no sería capaz de cortarle un sueño que siempre ha tenido. Él es muy culé; es más culé que todos los demás juntos. Era una oportunidad para él, y me alegro muchísimo por él”, explicó. Lo que pasa es que para nosotros es complicado encontrar a alguien que sepa en cada momento lo que buscamos y necesitamos. Por eso, al elegir un analista, tardamos en encontrar un reemplazo”.
Christiansen tiene contrato hasta 2026 y no se suele adelantar a cuál será su próximo paso en su carrera. Ya ha recibido ofertas pero ahora se siente a gusto con Panamá, en donde quiere que aparte de una clasificación mundialista también quede un legado.
“La clasificación es importante. Es un resultado de un cierto tiempo, pero tan famoso que se ha hecho el método europeo que no es un método europeo. Es ser profesional, perseverante, querer mejorar en todos los aspectos, logística, infraestructura y hábitos. Cambiar los hábitos no tan buenos en saludables y deportivos”, explicó.
Finalmente, en cuanto a la falta de convocatorias de jugadores de la LPF, Christiansen argumenta que el salto en la exigencia física es uno de los factores.
“Principalmente el competir en partidos internacionales. Por ejemplo, en los partidos de EEUU y Canadá, la intensidad que hubo causó problemas musculares y eran legionarios. No están acostumbrados a esa exigencia física”, comentó.
“Luego imagina la LPF, con los números que tenemos, lo que estamos haciendo con la mayor hay un salto importante y creo que también de la LPF es importante que vayan fuera y muestren y vayan a mejores ligas. Podemos ir aquí a lado donde la liga, económicamente, es más atractiva, pero futbolísticamente no pegas un salto muy grande. Lo más cercano aquí es ir a la MLS o México y es ahí donde debemos pegar el salto”, añadió.