El plan maestro del Metro de Panamá propone una red de ocho líneas proyectadas hasta 2040, incluyendo la línea 1 que está en operación y la línea 2, en construcción.
La red comprende cerca de 90 estaciones para ofrecer el servicio de transporte a los residentes en el área metropolitana, que cubre las comunidades de San Miguelito, Arraiján y La Chorrera.
La actualización del plan maestro fue presentada por el director del Metro de Panamá, Roberto Roy, en en el Foro Visión 2016, organizado la semana pasada por Martes Financiero.
Actualmente se construye la primera fase de la línea 2, que se extiende desde San Miguelito hasta Nuevo Tocumen. Quedaría pendiente la extensión hasta Felipillo.
El próximo gobierno que gane las elecciones en 2019 se encargaría de completar la línea 3, que conectará la ciudad de Panamá con Arraiján y La Chorrera.
LINEAS
Una red del Metro con ocho líneas y unas 90 estaciones dará servicio de transporte a la ciudad de Panamá y su área metropolitana, incluyendo San Miguelito, Arraiján y La Chorrera.
Esta es la aspiración de la empresa estatal Metro de Panamá, S.A., para el año 2040, y así lo ha plasmado en la actualización de su plan maestro, que fue presentado por primera vez por Roberto Roy, director general de la empresa pública, en el Foro Visión 2016, organizado la semana pasada por Martes Financiero.
La primera línea del Metro entró en operación en 2014. Su demanda ha duplicado las proyecciones más optimistas de las autoridades. Se pensó originalmente para 120 mil pasajeros al día y actualmente lo utilizan en promedio 260 mil pasajeros cada día.
Para atender esta demanda, Metro de Panamá compró más trenes, de manera que la configuración de los convoyes pasará de tres a cinco vagones.
Una de las actuaciones previstas para esta administración es la extensión de la línea 1 hasta Villa Zaíta, donde habrá una terminal multimodal y estacionamientos para que los usuarios puedan dejar sus vehículos.
También quedará construida durante este gobierno la primera fase de la línea 2, que irá desde Nuevo Tocumen a San Miguelito, donde se conectará con la línea 1. Este contrato fue adjudicado a un consorcio formado por las constructoras Odebrecht y FCC, que utilizarán, como en el caso de la línea 1, trenes Alstom. El costo de esta línea será de $2 mil 62 millones, incluyendo el financiamiento. El precio será muy similar a los $2 mil 90 millones invertidos hasta el momento en la línea 1, construida por el mismo consorcio.
La línea 2 tendrá un ramal que la conectará con el aeropuerto de Tocumen. Ese costo, que no se ha incluido en el contrato original de la obra, podría ser compartido entre Metro de Panamá, S.A., y Tocumen, S.A. La intención de Roy es que también se concrete esta extensión durante el actual gobierno. Para una tercera fase quedaría la extensión de la línea hasta Felipillo.
La próxima administración (2019-2024) será la encargada de culminar la línea 3, que conectará la ciudad de Panamá con Arraiján en una primera fase y llegará hasta La Chorrera en la segunda.
Este proyecto, no obstante, será iniciado en la actual administración. El gobierno llegó a un acuerdo con Japón para que provea el financiamiento de la línea y una donación para contratar al gerente de proyecto, a cambio de utilizar tecnología japonesa. Roy dijo que se utilizará un monorriel en lugar de un tren por las pendientes y curvas que tendrá que sortear una línea que pasará por el cuarto puente sobre el Canal, proyecto que será licitado y ejecutado por el Ministerio de Obras Públicas.
Adelantada la conexión hacia el Oeste, el plan de Metro de Panamá es construir la extensión de la línea 2 hacia el centro de la ciudad. La línea, que en ese momento ya llegará a San Miguelito, continuaría por toda la Tumba Muerto, pasando por El Bosque, El Dorado, Plaza Edison, en un tramo elevado que se soterraría a la altura de la Universidad de Panamá para llegar a la iglesia del Carmen, donde habría un transbordo a la línea 1. Luego seguiría de manera subterránea bajo la avenida Federico Boyd hasta el parque Urracá, donde terminaría la línea.
Roy aclara que el orden de ejecución de las líneas, y por lo tanto su numeración, dependerá de las decisiones que tomen los respectivos gobiernos en su momento. “El proyecto del Metro trasciende administraciones. Esperamos que los gobiernos del futuro entiendan y aprecien el beneficio que el sistema Metro le da al público”, apuntó.
Según la red maestra actualizada, la cuarta línea iría desde Pedregal hasta Punta Pacífica, recorriendo la avenida José Agustín Arango, vía España, para conectar finalmente vía Brasil y vía Israel.
La línea cinco partiría de la iglesia del Carmen, recorrería el área bancaria, calle 50, llegaría al parque Omar, Parque Lefevre, y culminaría en Costa del Este. “Esta será una línea muy poderosa, porque calle 50 tiene muchos carros”, señaló Roy.
Las tres últimas líneas que se contemplan en la red maestra son tranvías o trenes ligeros. La línea 6 conectaría Albrook con la Ciudad del Saber, Miraflores y la Ciudad de la Salud, complejo hospitalario en ejecución que demandará una solución de transporte colectivo.
La línea 7 sería un tranvía turístico desde la 5 de Mayo hasta el Casco Antiguo y la 8 conectaría Villa Zaíta y Las Cumbres con Don Bosco, además de la línea 1 con la línea 2. Esta sería la última línea en el plan y su ejecución estaría vinculada al futuro desarrollo de la zona.
Según los cálculos preliminares, cuando esta red esté en operación, podrá transportar en dos horas 280 mil pasajeros, cifra similar a la que moviliza actualmente en todo un día.