La Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá expresó su preocupación por el cierre de la vía Interamericana y otras calles de la provincia de Chiriquí, como parte delas protestas contra el proyecto hidroeléctrico Barro Blanco.
“Rechazamos el uso de estas medidas anárquicas como mecanismo para imponer posturas que transgreden los derechos ciudadanos. Instamos a las autoridades a que hagan cumplir la Ley y que se respeten las garantías constitucionales, como lo es la libertad de tránsito”, manifestó Carlos Fernández, presidente de la Cámara.
Según Fernández, cada hora transitan entre mil 800 a 4 mil 500 vehículos por la Interamericana, “que se ven afectados por esta intransigencia”.
“Esto conlleva un costo millonario en pérdida de bienestar para la población, de competitividad para el país y de productividad para los trabajadores y estudiantes”, indicó.
También pidió a las partes dialogar en aras de encontrar una solución que permita la continuidad de la obra, ya que –en caso contrario- se le enviaría un mensaje equivocado a los inversionistas.
“Sugerir la suspensión de un proyecto que mantiene más del 90% de avance es un exabrupto que se aleja de cualquier punto de consenso”, agregó.
A Generadora del Istmo, S.A. (Genisa), que desarrolla el proyecto hidroeléctrico, recomendó encontrar los mecanismos de apoyo a la comunidad, “por medio de su programa de responsabilidad social”.