El impuesto al valor agregado (IVA) entró en vigor en Costa Rica este lunes en sustitución del impuesto a la venta, en medio de un ambiente convulso por una protesta de sindicatos de educadores y de camioneros que tiene bloqueadas varias rutas del país.
Las tensiones provocaron la renuncia del ministro de Educación, Edgar Mora, quien se vio inmerso en un torbellino de reclamos de estudiantes que fueron adoptados por los camioneros y otros sectores.
En tanto, el presidente Carlos Alvarado anunció mesas de diálogo con los diferentes sectores de las protestas, al tiempo que exigió el fin de los bloqueos de carreteras.
El IVA que rige desde este lunes en Costa Rica es de 13%, al igual que el antiguo impuesto a la venta, con la diferencia de que se incluyen algunos servicios excluidos del gravamen anterior.
Junto al IVA comenzó a regir un incremento en el impuesto sobre la renta para las personas con salarios más elevados, medidas adoptadas como parte de una reforma tributaria dirigida a contener el déficit fiscal, que alcanzó 6% del PIB en 2018.
Un grupo de camioneros bloqueó rutas en el norte, sur y Caribe del país, una manifestación que comenzó contra el IVA, pero que respaldó también el reclamo de estudiantes de algunos colegios públicos que exigían la renuncia del ministro Mora.
La protesta contra el ministro surgió por la oposición de los alumnos a los planes de instalar baños mixtos para evitar la discriminación de estudiantes transexuales, y un proyecto de educación dual para que los estudiantes realicen prácticas profesionales en empresas.
Aunque la mayoría de los camioneros aceptó el viernes deponer el paro para abrir una negociación con el gobierno, otro sector se negó a suspender la protesta y exigió la salida del ministro Mora.

