La Unión Europea amenazó con sancionar a países como Panamá si siguen negándose a cooperar por completo en la lucha contra el lavado de dinero y evasión fiscal, después de que datos filtrados mostraron que el país sigue siendo un destino clave para las personas que desean ocultar dinero.
La filtración de al menos 11.5 millones de documentos del bufete legal panameño Mossack Fonseca mostró que esta firma ayudó a miles de hombres y empresas de todo el mundo a crear empresas y abrir cuentas en territorios considerados paraísos fiscales. Debido a que este tipo de activos muchas veces ocultan al dueño original, las inversiones offshore son preferidas para lavar dinero, pagar sobornos o evadir impuestos.
El escándalo por los llamados Papeles de Panamá ya hizo renunciar al primer ministro de Islandia y tiene en el caldero a los presidentes de Ucrania y Rusia, así como políticos, actores, atletas y empresarios.
"La gente está harta de estos atropellos", dijo Pierre Moscovici, comisario de Asuntos Económicos y Financieros de la Unión Europea. Hablando de países como Panamá, dijo que la UE "tiene que estar lista para golpearlos con las sanciones apropiadas si se reúsan a cambiar".
"Las cantidades de dinero, las jurisdicciones y nombres asociadas con este asunto son francamente impactantes", agregó Moscovici.
El gobierno de Panamá acusó a otros países adinerados de atacar injustamente al país centroamericano y hacer oídos sordos a sus propios sus fallos.
El presidente Juan Carlos Varela anunció la creación de un comité de expertos internacionales que recomiende formas de impulsar la transparencia en el sector financiero que maneja dinero de extranjeros en Panamá. Los expertos señalan que si bien las empresas en el extranjero se pueden utilizar para evadir impuestos y lavar dinero, también hay motivos legítimos y legales para crearlas.
En Alemania, los legisladores dijeron que tenían previsto celebrar un debate urgente la semana que viene sobre las filtraciones.
"Las revelaciones en los Papeles de Panamá han desatado un amplio debate entre los políticos y el público sobre las necesarias consecuencias", dijo Christine Lambrecht, legisladora del Partido Socialdemócrata, que forma parte de la coalición de gobierno de la canciller Angela Merkel.
Mientras, el diario alemán que obtuvo en primer lugar los llamados Papeles de Panamá afirmó que no publicará todos los archivos, alegando que no todos son de interés público.
El periódico Sueddeutsche Zeitung recibió los documentos hace más de un año de una fuente no identificada y compartió al menos parte de ellos con decenas de medios de comunicación de todo el mundo. Desde que se publicaron los primeros reportes el domingo, políticos destacados, famosos y empresarios han visto sus operaciones financieras en el extranjero arrastradas a la luz pública.
El medio afirmó que el lote completo de 11.5 millones de documentos "no se ofrecerá al público o a agencias de seguridad. Eso se debe a que el SZ no es una extensión de la fiscalía o los investigadores fiscales".
Las autoridades tienen competencia legal para obtener los documentos de las personas sospechosas de malas prácticas, informó el periódico, con sede en Múnich y en muchos casos no hay un interés público en revelar las operaciones financieras en el extranjero de personas o empresas.
El despacho Mossack Fonseca dijo haber presentado una demanda alegando que los datos se robaron en un ataque informático.
El Sueddeutsche Zeitung dijo desconocer cómo había obtenido los datos la fuente anónima, pero que él o ella expresó "un impulso moral muy fuerte" y quería hacer "públicos estos delitos".
En respuesta a preguntas de los lectores sobre la ausencia de políticos alemanes o estadounidenses en los documentos, el Sueddeutsche Zeitung dijo que por el momento no se habían encontrado estos nombres en los documentos.
En los archivos hay copias de pasaportes de 200 estadounidenses y unos 3 mil 500 accionistas de empresas extranjeras afirmaron direcciones en Estados Unidos.
"Un posible motivo por el que en comparación aparecen pocos estadounidenses en los documentos podría ser que los ciudadanos estadounidenses no tienen motivos para contactar con una firma legal en Panamá", informó el periódico. "Eso se debe a que resulta fácil crear empresas extranjeras en estados como Wyoming, Delaware o Nevada".
Por su parte, el líder ruso Vladimir Putin negó en un foro en San Petersburgo estar vinculado con los Papeles de Panamá.