Volkswagen, que reconoció haber trucado 11 millones de carros con falsas mediciones de contaminación, descartó este jueves, 22 de octubre, tras las verificaciones pertinentes, que el fraude se haya extendido a otros motores diésel.
“Ahora está claro” que los dispositivos fraudulentos detectados en los motores diésel de modelo EA189 “no fueron instalados” en los motores EA288, de la generación siguiente, indicó VW en un comunicado citado por la agencia alemana DPA.
La empresa, contactada por la AFP, no estaba disponible en lo inmediato para comentar el reporte.
Las sospechas que pesaron sobre el grupo tras trascender la existencia de una investigación no desestabilizaron sus acciones en la Bolsa de Francfort, donde el título VW cerró con un alza de 3.39%, superior al del índice Dax de los principales valores, que terminó con ganancias de 2.48%.
VW reconoció haber manipulado los motores de once millones de vehículos diésel de varias de sus doce marcas.
Las revelaciones le valieron la apertura de demandas judiciales en varios países y provocaron un derrumbe de la mitad de su capitalización bursátil.
El grupo prepara además un llamado a revisión masivo de los vehículos afectados.