El ministro de Economía, Héctor Alexander, materializó el efecto de la invasión rusa a Ucrania y el choque que esto representa para Panamá en lo que respecta a los precios de los combustibles.
Dijo que en el mes de junio el país gastó de $95 a $100 millones más, comprando con lo que se tuvo que asumir en gasto de combustible en el mes de enero de 2022.
Esta factura en combustible es lo que han tenido que asumir las familias, las empresas y el Gobierno.
"La guerra entre Rusia y Ucrania está haciendo que el mundo sea perdedor. Estamos perdiendo un nivel de bienestar que es importante".
Héctor Alexander, Ministro de Economía y Finanzas
“Si lo vemos de aquí a finales de año y los precios se mantuvieran, podríamos estar hablando de un poquito mas de $1,000 millones [adiocionales], solo contando los gastos en combustible”, precisó el titular de economía, quien ha sido poco visible frente a las presiones inflacionarias que enfrenta el país a raíz de la guerra.
En la mañana de este sábado 9 de julio, Alexander participó en la apertura de un diplomado de periodismo económico en la ciudad capital, organizado por el Banco Nacional de Panamá, en donde habló sobre los efectos colaterales y devastadores que viven los países importadores de combustible.
En este contexto dijo que la pérdida para el país será irrecuperable. “El país está teniendo una pérdida de dinero muy importante. Dinero que está saliendo de Panamá” al ser importador de combustible.
El funcionario esquivó hablar sobre su postura respecto al congelamiento del impuesto de importación del combustible que piden varios gremios empresariales y de trabajadores.
Incluso dejó ver que el efecto de una medida como esta tiene un muy bajo impacto respecto a lo que representa la guerra para la economía panameña.
La eliminación o el congelamiento del impuesto son $220 millones, dijo. “De lo que yo estoy hablando es de lo que el país perdió con la guerra y lo que está perdiendo que no es recuperable, y poco se habla de eso”.
ESTUDIO
Un reciente estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) hizo referencia a las estimaciones iniciales de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en las que se indicó que el costo de la guerra podría reducir el crecimiento mundial un punto porcentual, agregar 2.5 puntos porcentuales a la inflación global y sumar 1.5 puntos porcentuales más a las tasas de interés para los mercados emergentes.


