El problemático desembarque el pasado sábado 3 de diciembre durante el primer día de operaciones del “home port” en la terminal de cruceros de Amador ha dejado ver las deficiencias de la operación y ha dado lugar a más críticas y recomendaciones para el Gobierno.
La Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresas (Apede) y la Cámara de Turismo de Panamá (Camtur) han criticado la falta de organización durante el desembarco y abordaje de cerca de 3 mil pasajeros, de los cuales mil 800 habían llegado vía aérea al país para subirse al crucero Norwegian Jewel.
La falta de una zona dentro del puerto de crucero para el registro de entrada y salida de los pasajeros del crucero provocó que el proceso se extendiera por más de 7 horas.
Apede y Camtur indican que el turismo panameño a penas inicia el proceso de recuperación luego de la crisis provocada por las restricciones de movilidad implementadas durante los dos primeros años de la pandemia respiratoria. Destacan que sucesos como los ocurridos el pasado sábado no solo afectan la imagen del país, sino que le restan competitividad frente a otros destinos que están en la lucha por captar más viajeros internacionales.
“Si las operaciones en los puertos no son manejadas de manera eficiente, bajo criterios y estándares de calidad mundial, se pone en riesgo la permanencia de estas operaciones en nuestro país, desaprovechando las importantes inversiones realizadas”, advirtió la Apede.
Ayer, el administrador del Autoridad de Turismo de Panamá, Iván Eskildsen, señaló que se tomarán las acciones para resolver las fallas que afectaron el registro de pasajeros en la terminal de Amador.
Por su parte, Camtur criticó que se limite a las empresas turísticas a contratar servicios de suministros con un solo proveedor, ya que esto limita la competencia y la imagen del país.
El gremio hace referencias a las denuncias de las empresas de crucero que indican que se les obliga a contratar el suministro de combustible con un solo proveedor cuando llegan a la provincia de Colón.
Sobre este tema la Asociación de Armadores Panameños (Arpa) pidió a la Autoridad Marítima de Panamá terminar con las prácticas monopolistas dentro de los puertos panameños al ser la responsable de aprobar las licencias de las empresas que brindan los servicios auxiliares dentro de los puertos panameños. Arpa advierte que estas prácticas “hunden al país hacia profundidades” que afectan su imagen.