En medio de un convulsionado ambiente para la aviación, con el precio del combustible elevado a raíz de la guerra entre Rusia y Ucrania, y justo cuando el turismo intenta salir de los días oscuros de la pandemia, una aerolínea de bandera dominicana está asomando la cabeza en varios aeropuertos de la región para irrumpir en el mercado de low cost.
Se trata de Arajet, basada en el Aeropuerto Internacional de las Américas, en Santo Domingo, que ultima detalles para competir en el segmento en el que se mueven Wingo, Viva Air y Ultra Air, por mencionar algunas contrincantes.
Víctor Pacheco, Ceo y fundador de Arajet, habló con este diario desde República Dominicana y explicó que ya ultiman detalles para iniciar operaciones desde Santo Domingo a El Salvador, Guatemala, México y Colombia en el mes de septiembre. Y luego, en octubre, arrancarán con las operaciones en Costa Rica.
Para Panamá todavía no tienen una fecha definida, pues están por determinar permisos y trámites aeroportuarios que van de la mano con la localización del aeropuerto desde el que decidan operar en el país.
Pacheco observa este mercado con entusiasmo, en especial por la experiencia de la local Copa Airlines, a quien más que un enorme competidor observa como el hermano mayor del que toca aprender.
Sus ambiciones son enormes, pues para 2027 esperan servir a más de 45 destinos de manera directa.
Por estas próximas dos semanas un equipo de 114 empleados gerenciales trabaja en la programación de los vuelos que deben estar disponibles para la compra de tiquetes según los primeros destinos seleccionados por la empresa.
Para cumplir con el plan de vuelo de la empresa, Pacheco reveló que están invirtiendo alrededor de $3,000 millones para la compra de aviones y la puesta en marcha de toda la operación.
La inversión más grande es para la compra , ya confirmada, de 20 aviones. Hay otros 15 que son opcionales.
La flota está integrada por aeronaves Boeing 737 MAX, reconociendo el valor de contar con aviones de alta eficiencia en manejo de combustible y por ser amigables con el medio ambiente, alcanzando una reducción en la emisión de C02 de hasta un 20% comparada con la generación anterior.
Bain Capital es el inversionista extranjero detrás de esta apuesta llamada Arajet. Se trata de un fondo global que tiene más de $160,000 millones en activos en diversos sectores de la economía.
“No somos una aerolínea que estará haciendo pruebas. Esperaremos a que el mercado madure y estaremos en todo ese proceso”, dijo Pacheco, quien reconoce que se viven momentos de grandes desafíos a nivel mundial, pero es precisamente este contexto el que ha generado oportunidades, contratando el talentoso capital humano que quedó fuera del mercado laboral a raíz de la crisis generada por el confinamiento y la parálisis de la aviación al inicio de 2020.
De hecho, recuerda que la idea original era iniciar operaciones antes de la pandemia, pero atrasos en el proceso de capitalización frenaron los planes, lo cual cayó como anillo al dedo, porque hubiesen tenido que lidiar con el frenazo que trajo la covid-19.
El perfil del viajero es el dominicano que vive fuera de su país, pero que tiene raíces en la isla y necesita viajar constantemente, pero también les interesa estimular la demanda entre esos viajeros que pueden animar el turismo de vacaciones desde la isla hacia otros destinos de la región y viceversa. Pacheco habla de la democratización de la industria, con viajes a precios que aún no hemos visto. Septiembre será la prueba de fuego.