La Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (Asep) anunció ayer una ligera reducción en la tarifa eléctrica promedio para la mayoría de los clientes a partir de julio.
El anuncio se hizo en un foro informativo sobre las tarifas para el segundo semestre del año, efectuado de manera virtual.
Jenny Rivas, jefa del Departamento de Análisis Económico y Financiero de la Asep, dijo que para los clientes de la Empresa de Distribución Eléctrica Metro-Oeste S.A (Edemet), la tarifa promedio tendrá una disminución de 0.3%, y para los de ENSA, de alrededor de 2%; mientras que el 99% de los clientes de la Empresa de Distribución Eléctrica de Chiriquí (Edechi) no verán variación.
El precio que finalmente paga la mayor parte de usuarios tiene un subsidio estatal, que se cubre con fondos de todos los contribuyentes.
La tarifa eléctrica tiene tres grandes subsidios: el Fondo de Estabilización Tarifaria (FET), para aquellos clientes que consumen menos de 300 kilovatios-hora (kw/h) y que se estima representará un gasto de $34 millones en el segundo semestre; el aporte del Fondo Tarifario de Occidente (FTO), para los clientes de Edechi, con $36 millones en el semestre, y el FET Extraordinario Covid-19, subsidio creado durante la pandemia y dirigido a clientes cuyo consumo no sobrepasa los 750 kw/h, que representa $11 millones mensuales.
Armando Fuentes, administrador de la Asep, explicó que hasta el momento este subsidio especial por covid-19 está aprobado hasta julio. Su extensión está pendiente de la decisión del Consejo de Gabinete, dijo la Asep.
De esta forma, el 93% de los clientes de las tres empresas de distribución, es decir, 1.15 millones de clientes, recibe algún tipo de subsidio en su tarifa.
Rivas puso el ejemplo de que un cliente de Edemet que consume hasta 300 kw/h, que en lugar de pagar el precio promedio de la tarifa, más el cargo por variación de combustible de 16.12 centavos por kw/h, pagará 7.96 centavos por kw/h, resultando en un aporte del Estado a la factura de 51%.
En 2020 y 2021, el gasto total en subsidios del Gobierno se disparó por motivo de la pandemia. Varios representantes del sector privado han reclamado al Ejecutivo que implemente una política de revisión, evaluación y priorización de subsidios para focalizarlos en aquellas personas que realmente los necesitan y así aliviar las carga del Estado, liberando recursos para otras actividades más productivas.