Asociatividad y alianzas para el emprendimiento



Esta semana tuve el privilegio de compartir con más de 40 empresarias una charla sobre alianzas estratégicas. Desde el año 2014, el Centro de Innovación de la Ciudad del Saber se puso en marcha para lanzar un proyecto destinado específicamente a mujeres emprendedoras y empresarias, denominado “Canal de Empresarias” y fue un excelente espacio para profundizar en este tema.

En esta oportunidad hicimos una evaluación de los desafíos de las empresarias y de cara al futuro las alianzas estratégicas surgen como una decisión estratégica de gran valor.

La asociatividad se considera como un componente del emprendimiento porque garantiza la efectividad de las interacciones que pueda establecer el emprendedor con su comunidad, a través de ecosistemas colaborativos y de aprendizaje sostenido para alcanzar objetivos de negocio.

Para avanzar en la creación de alianzas estratégicas es importante entender el entorno competitivo, las áreas identificadas para la creación de valor, las fuentes de complementariedad que ofrece el aliado. Adicionalmente la amalgama que permite que la alianza prospere es la confianza.

En una alianza estratégica las empresas cooperan por una necesidad mutua y comparten riesgos a fin de alcanzar un objetivo común. Entre las ventajas que ofrece una alianza estratégica bien formulada están:

Permite fortalecer la propuesta de valor para el cliente y profundizar en el life time value. Amplía la posibilidad de atraer nuevos clientes, ofrecer soluciones integrales a los clientes, mejorar el alcance de la oferta, aumentar la lealtad de los clientes y reducir la rotación de clientes.

Se minimizan los riesgos de expansión, reduciendo necesidades de activos e inversiones, asegurando riesgos y rendimientos compartidos y permite reducir financiación y necesidades de capital.

Genera oportunidades tales como aumentar la velocidad de comercialización e innovación: oferta de nuevos productos, crear reconocimiento y visibilidad de marca rápidamente, soporte a nuevos segmentos de clientes, acceso internacional de clientes.

También contribuye a mejorar la mezcla de productos permitiendo una mayor diversificación, mejorar la venta cruzada, ampliar mercados y llenar vacíos de productos.

Permite mejorar la posición / estructura de costos efectiva: menores costos de acceso a mercados, menores costos de desarrollo de productos, menores costos en innovación y aumentar economías de escala.

Abre la posibilidad de mejorar los activos intangibles y las habilidades de la organización: ampliar el conocimiento y habilidades del equipo, contar con tecnología de apoyo a innovación, apoyar la penetración los mercados internacionales, mejorar el liderazgo y fomentar una cultura organizacional co-creadora y mejorar y agilizar procesos de negocio.

Todo esto contribuye a fortalecer una posición competitiva defensiva y conquistar la posición estratégica de otros competidores. La complementariedad de una alianza estratégica también permite centrarnos en nuestras competencias básicas.

En un mundo complejo donde la velocidad de los cambios es tan acelerada, las alianzas estratégicas deben ser consideradas como un factor crítico de éxito, muchos más en proyectos de emprendimiento que cuentan con grandes retos para poder sostenerse en el tiempo.

El autor es fundador de Semiotik Consulting. Consultor en reputación corporativa, comunicación estratégica y gestión de riesgos


LAS MÁS LEÍDAS