Tras un retraso de siete años en su construcción, este martes 23 de agosto la Autoridad de Turismo de Panamá (ATP) recibió con algunos pendientes, el nuevo Centro de Convenciones de Amador, obra que alcanza un costo de 207 millones de dólares.
El centro debía estar terminado, según el contrato firmado en 2012, para finales de 2014, pero el abandono del contratista original, sumado a otros contratiempos financieros, afectaron el cronograma de desarrollo del proyecto.
Iván Eskildsen, administrador de la ATP, indicó que tras las inspecciones que realizó la entidad, junto con la Contraloría General de la República y la empresa que supervisó la obra, Ayesa, se determinó que el estado de la obra permite su puesta en operación, aunque aclaró que todavía quedan detalles que el contratista chino, CCA-CSCEC, integrado por las empresas China State Construction Engineering Corporation y CCA Building Panamá S.A. debe culminar en las próximas semanas.
Entre lo pendientes están inspecciones relacionadas con el sistema de enfriamiento de aire, es decir, que los ductos estén limpios, así como los filtros de aire, factores que toman mayor relevancia en medio de la pandemia respiratoria del coronavirus (Covid-19).
Eskildsen había adelantado a La Prensa, que el Centro de Convenciones estaba terminado hace tres meses, pero problemas internos de la constructora con la empresa que instaló el sistema de enfriamiento de aire, la cual realizó un embargó a una serie de activos de CCA-CSCEC, retrasó aún más la entrega del proyecto.
El administrador de la ATP comentó que se hicieron las gestiones en la Contraloría para agilizar una serie de pagos que se mantenían pendientes con el contratista, lo que sirvió para que la compañía solucionara el conflicto con su subcontratista.
“Después de una larga espera ya contamos con el nuevo Centro de Convenciones que permitirá traer eventos importantes al país, lo que ayudará a reactivar la economía”, manifestó Eskildsen. Tras la entrega de este lunes, la ATP debe realizar el traspasó de la administración del edificio que ocupa una huella de 56 mil metros cuadrados a la empresa SMG World, que será la responsable de comercializar la estructura y captar eventos internacionales.
Ernesto Orillac, presidente de la Cámara de Turismo de Panamá, quien estuvo presente durante la entrega del proyecto, comentó que el turismo de congresos y convenciones tiene el potencial de generar un flujo importante de visitantes al país, que según estudios realizan un gasto diario de 600 dólares, lo que representa una entrada de divisas importante.
Por su parte, Kenelma Mendoza, presidenta de la Asociación Panameña de Profesionales en Congresos, Exposiciones y Afines (Appce), expresó que la puesta en operación del nuevo Centro de Convenciones permitirá promocionar a Panamá para atraer importantes eventos, lo que beneficiará a la economía.
Para finales de septiembre el Centro de Convenciones recibirá su primer evento con la clausura de la Convención Nacional de Turismo y en noviembre será sede de la reunión de la Asociación de Cruceros de Florida y el Caribe (FCCA), evento que se espera reúna a 5 mil ejecutivos de esta industria.