La cadena agroalimentaria de papa y cebolla aprobó importar 60 mil quintales de cebolla para los meses de octubre y noviembre o 30 mil quintales para cada mes, con el fin de completar el requerimiento del consumo nacional.
Se calcula que mensualmente en Panamá se consumen entre 50 mil y 55 mil quintales de cebolla amarilla, uno de los principales condimentos en el menú de los panameños. Para asegurar esta demanda se considera la producción nacional y cuando se prevé faltante se autoriza la importación.
“Para estos dos meses se prevé un aporte de 50 mil quintales de cebolla de producción nacional”, informó Augusto Jiménez, productor de Tierras Altas de Chiriquí.
La decisión de importar cebolla se adopta entre los 14 miembros de la cadena agroalimentaria luego de una evaluación del inventario del producto en el campo y el almacenado.
El ejercicio se realiza en la reunión mensual de la cadena donde se presentan los números de la cantidad de hectáreas sembradas y la cantidad en cosecha.
Durante la temporada lluviosa la producción nacional de cebolla en el país disminuye debido a que el exceso de agua afecta el cultivo y en algunos casos los productores prefieren aplazar la siembra. A la producción nacional de octubre se le aplicará una merma del 24% y a la de noviembre 12%, de acuerdo con lo aprobado en la cadena.
En la cadena agroalimentaria participan representantes de los productores, comerciantes, consumidores, agroindustriales y distribuidores de insumos agropecuarios, entre otros.
Los consumidores afirman que como gremios organizados siempre han alegado que cuando no hay producción nacional se permita la mayor cantidad de importación para beneficio de los consumidores.
De acuerdo con la Dirección Nacional de Agricultura del Ministerio de Desarrollo Agropecuario (MIDA), en Chiriquí se cultivan unas 607.75 hectáreas de cebolla con una producción estimada de 364 ,650 quintales. En las provincias centrales se cultivan unas 349 hectáreas de cebolla con una producción de 231 mil quintales.
La zona de Tierras Altas, provincia de Chiriquí es la mayor productora de este rubro ya que se siembran todo el año, mientras que en tierras bajas, provincias centrales como Coclé, Herrera y Los Santos, el trasplante se hace entre los meses de noviembre, diciembre y parte de enero.
