El Aeropuerto Internacional de Tocumen decidió cancelar, para luego relanzar, la emisión de bonos por $625 millones que se había colocado en el mercado internacional y que tenía como fecha de cierre el día de hoy. Ahora se ha reprogramado para las próximas 24 o 36 horas.
Los bonos se habían vendido exitosamente, pero los riesgos percibidos por los inversionistas ante las acusaciones de lavado de dinero en las que se vinculaba a empresas y varios miembros de la familia Waked generaron incertidumbre.
Waked International, S.A., (WISA) es una de las concesionarias de los duty free y genera el 7% del ingreso del aeropuerto.
TOCUMEN REDEFINE EMISIÓN DE DEUDA
La inclusión de las empresas del Grupo Waked Internacional (Wisa) en la Lista Clinton por haber sido utilizadas supuestamente en un esquema de lavado de capitales ha tenido una consecuencia directa en la empresa estatal que administra el Aeropuerto Internacional de Tocumen.
Tocumen, S.A., que tiene en el Grupo Wisa a uno de sus principales clientes, modificará las condiciones de una emisión de deuda con la que la administración de la terminal aérea espera costear la construcción de la T2, nueva infraestructura que ejecuta la constructora Norberto Odebrecht y que elevará la capacidad del aeropuerto.
El pasado 4 de mayo se lanzó al mercado la oferta de bonos por $625 millones y un cupón de 5.375%.
El gerente de la terminal aérea, Joseph Fidanque III, confirmó que los $625 millones de la emisión se habían colocado de forma exitosa a través de Citigroup Global Markets.
No obstante, la operación no se había perfeccionado y la inclusión de las empresas de la familia Waked en la lista que elabora la Oficina de Control de Activos Financieros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos generó inquietud entre el público inversionista.
Ayer, la casa de valores Citivalores informó a la Bolsa de Valores de Panamá que el comprador inicial de la emisión, Citigroup Global Markets, determinó que las condiciones precedentes previstas en el acuerdo de compra no habían sido satisfechas y dejó sin efecto la oferta de bonos efectuada el pasado 4 de mayo y cuya fecha de cierre era este 11 de mayo.
Un importante cliente Grupo Wisa es uno de los principales clientes de Tocumen, S.A. En 2007, recibió una concesión para vender productos libres de impuestos en la terminal aérea, incluidos perfumes, cosméticos, bebidas alcohólicas, tabaco y accesorios de lujo. Wisa pagó $115 millones por los derechos de llave.
Además, según consta en el prospecto de la emisión, mensualmente este concesionario paga a Tocumen, S.A. un alquiler de $100 por cada metro cuadrado que ocupa y el 8% de sus ventas brutas.
El contrato entre terminal y concesionario vence en diciembre de 2017. A poco más de un año para que se cumpla ese plazo, la administración de Tocumen está sentando las bases de la nueva licitación, que se proyecta ejecutar en el tercer trimestre del año.
En tanto, la acción tomada por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos impide a empresas y personas del país norteamericano tener relaciones comerciales con la mayoría de las compañías del Grupo Wisa.
Esto significa que las tiendas no podrán vender productos de Estados Unidos ni recibir pagos a través de tarjetas de crédito como Visa o Mastercard.
Ante esta situación, Tocumen espera relanzar la emisión a finales de esta semana con unas nuevas condiciones que todavía se desconocen.
Fidanque prefirió no dar mayores detalles de los pasos que se tomarán respecto a la emisión porque, a su juicio, se podría entorpecer la búsqueda del dinero con el que se financiará parte de la ampliación de la terminal aérea.
Este diario conoció que la nueva emisión se haría por un monto cercano a los $400 millones o $500 millones de dólares, dependiendo del apetito que demuestre el mercado y los riesgos que se perciban, lo que, en consecuencia, también determinará la tasa de interés.
A Tocumen le ha tocado explicarle a los inversionistas que la terminal es una empresa sólida, cuyos ingresos superan los resultados obtenidos un año antes. En 2015, los ingresos de la terminal ascendieron a $188 millones, $22 millones más que el ejercicio del año anterior.
Una de las preocupaciones de los inversionistas era la cercanía del Grupo Wisa con la toma de decisiones de la terminal, al contar con José Frade en la junta directiva de la sociedad anónima que administra el aeropuerto bajo el modelo de una empresa privada.
Frade es vicepresidente de Finanzas y Auditoría del Grupo Wisa, propiedad de Abdul Waked, y se desempeñaba como director en la junta directiva de Tocumen en representación de los concesionarios del aeropuerto.
Cuando uno de los grupos económicos más poderosos del país, en manos de la familia Waked y cuyos líderes visibles Abdul Waked y Nidal Waked, fueron vinculados a una presunta red internacional de narcotráfico y lavado de dinero por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos (EU) y la Agencia Estadounidense Antidrogas (DEA, por sus siglas en inglés), la junta directiva de Tocumen pidió la renuncia inmediata de Frade.
Desde la administración de Tocumen se espera que el atraso de la emisión no represente un problema para financiar parte de la ampliación de la nueva terminal aérea T2, que tendrá 20 puertas de abordaje y 116 mil metros cuadrados, y cuya inversión supera los $800 millones.
Tocumen comunicó oficialmente que “ a la luz de los eventos recientes, ocurridos la semana pasada, se ha decidido reevaluar la transacción. Tocumen se encuentra considerando los próximos pasos y comunicará sus planes prontamente”.