Los países de Centroamérica terminaron el año 2023 con una desaceleración del crecimiento del mercado en el volumen de compra de alimentos y productos básicos.
El volumen sólo aumentó +2.9% frente al 3.8% registrado en 2022, además de un significativo incremento en los precios promedios en los comercios (supermercados, abarrotes, autoservicios, farmacias, canales tradicionales) de +13.6% en comparación con 2022 cuando el alza promedio fue de 10.6%, lo que afectó notablemente el poder adquisitivo de la población, según revela un estudio de la consultora de mercado NielsenIQ.
El mercado de consumo masivo representa en Centroamérica 45.5 millones de personas y alrededor de 397,445 establecimientos comerciales entre supermercados de cadenas, comercios y bodegas tradicionales, abarrotes y farmacias y alrededor de 100 mil millones de dólares en ventas o facturación anual.
La desaceleración en el consumo fue evidente en casi todos los canales de comercialización en especial el de los autoservicios de Centroamérica, explicó Annie Muñoz, Líder de Administración de Categorías en Latinoamérica, Estados Unidos y Canadá de NielsenIQ.
En enero de este año, la tendencia continúo siendo hacia un menor ritmo de compras. “Este comportamiento se replica en casi todos los canales de la región, por lo que enero suele ser un mes atípico para la tendencia por la concentración de estacionalidades de algunas de las categorías”.
Por países además de Panamá que registró la variación de consumo más baja, le siguió Costa Rica con un crecimiento de 2.3% en el consumo, mientras que el valor de la compra se elevó 24.5% en un año y las ventas en dólares de los establecimientos comerciales aumento 26.8% en contraste con 2022.
En Honduras el consumo aumentó 2.5% en 2023, los consumidores pagaron 7.3% por sus compras y las ventas en dólares para los comercios aumentó 9.7%. El Salvador cerró el año pasado con un crecimiento de 4.1% en el consumo, 5.7% en el valor de la compra y 9.7% en los precios de los bienes registrados por NielsenIQ para el estudio del sector retail.
En Guatemala mientras los precios crecieron 5.6% el consumo sólo aumentó 4.6% y las ventas en general aumentaron 10.2% impulsadas por el alza de precios y no por la cantidad de productos vendidos.
En Nicaragua el consumo cerró con una variación de 5.3%, el costo de la compra aumentó 9.3% y las ventas subieron 14.1%.