La pobreza y la desigualdad siguen afectando a una gran parte de la población de América Latina que no cuentan con suficientes recursos para cubrir sus necesidades básicas.
El informe Panorama Social de América Latina y el Caribe 2024 de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), revela que 172 millones de personas en la región no cuentan con ingresos suficientes para cubrir sus necesidades elementales y, entre ellas, 66 millones no pueden adquirir una canasta básica de alimentos.
Precisa que el porcentaje de la población latinoamericana en situación de pobreza en 2023 fue del 27.3%, cifra que representa una disminución de 1.5 puntos porcentuales en comparación con el año anterior y de más de 5 puntos porcentuales respecto de la registrada en 2020, el año más crítico de la pandemia de Covid-19.
Mientras que la tasa de pobreza extrema alcanzó el 10.6% de la población de la región, cifra inferior a la de 2022 en 0.5 puntos porcentuales, pero por encima de los niveles de 2014.
El Secretario Ejecutivo de la Cepal, José Manuel Salazar-Xirinachs, indica que la pobreza sigue afectando más a las mujeres que a los hombres en edad laboral y que el porcentaje de niñas, niños y adolescentes en situación de pobreza es considerablemente más alto que el de otros grupos etarios. La pobreza también es mayor en las zonas rurales (39,1%) que en zonas urbanas (24,6%).
En el caso de Panamá la Cepal detalla que la tasa de pobreza se ubicó al cierre del año 2023 en 14.3%, igual que en 2022 y ligeramente inferior al 15.7% registrado en 2021. Mientras que la tasa de pobreza extrema se mantuvo en 6.5% al cierre del año pasado, es decir en el mismo nivel de 2022, pero superior al 5.7% registrado en 2021.
Las personas en pobreza en Panamá registran un ingreso menor a 129 dólares mensuales y las que están en pobreza extrema, menor a 68 dólares en el área urbana. Mientras que en el área rural el ingreso máximo baja a 100 dólares para las personas en pobreza y 64 para las personas en pobreza extrema”.
El organismo indica que en Panamá 22.1% de la población tiene ingresos inferiores al 50% de la media.
Entre los factores asociados a la percepción de la injusticia en la distribución de los ingresos en el caso de Panamá, la mayor incidencia está relacionada a la poca confianza en instituciones públicas como en el Parlamento, los partidos políticos y el poder Ejecutivo con un puntaje de -0.52 puntos.
El informe de la Cepal detalla que las personas de los pueblos indígenas son afectadas por la pobreza en una proporción mucho más alta que las personas no indígenas ni afrodescendientes en casi todos los países de la región.
Incluso, el organismo señala que las mayores incidencias de la pobreza en la población indígena se observan en Guatemala, Colombia, Nicaragua y Panamá.
Además, refiere que las más altas diferencias relativas al comparar la incidencia de la pobreza en la población indígena y en la población no indígena ni afrodescendiente, en Panamá es 5.5 veces de diferencia, en Brasil 3 veces, en Ecuador 2.4 veces y Colombia 2.1 veces.
La Cepal también señala que, entre 2022 y 2023, no hubo variaciones significativas en los niveles de desigualdad de los ingresos en la región, manteniéndose persistentemente altos.
Entre 2014 y 2023, el índice de Gini experimentó una leve reducción del 4%, bajando apenas de 0.471 a 0.452. Sin embargo hay países donde el nivel de desigualdad es incluso superior al promedio regional, como el caso de Panamá.
La desigualdad en Panamá se ubica en 0.493 al cierre de 2023. En 2022 estaba en 0.496 y en 2019 estaba en 0.506.
Brasil y Colombia son los países con la desigualdad del ingreso más elevada, seguido de Costa Rica, Honduras y Panamá que se sitúan por encima del promedio regional.