El alza de la tarifa eléctrica inquieta no sólo a los consumidores sino a las empresas e industrias del país que dependen de esta fuente para su actividad.
A partir de este mes, los comercios e industrias registrarán alzas que incluso van más allá del promedio anunciado de entre 2% y 15% en la tarifa para los usuarios residenciales que consuman mensualmente más de 300 kilovatios-hora (kWh). Esto debido a que estas empresas suelen registrar un gran consumo por encima del promedio y algunos no cuentan con ningún tipo de subsidio.
La falta de licitaciones para la compra de energía a corto plazo que permitieran contratar energía a un precio fijo, hace que más del 30% de la energía que requieren algunas distribuidoras como ENSA, esté expuesta a los vaivenes de los precios del mercado ocasional. Al comprar energía en el mercado a libre oferta y demanda, para el requerimiento de los clientes de ENSA para este semestre. puede haber un mayor incremento de precios porque estarán influenciados por el fenómeno de El Niño, el encarecimiento del combustible, entre otros factores.
Para el caso de ENSA, un ejemplo del alza de la tarifa de un cliente residencial que consuma más de 350 kilovatios hora (kWh) al mes sin incluir ningún subsidio, pasaría de 61.55 dólares en la factura de diciembre a 70.41 dólares en la factura de enero, lo que equivale a un incremento promedio del 14.39%.
Un cliente residencial de ENSA que consuma, por ejemplo, 1,500 kWh, pagaba en diciembre 331.49 dólares, registrarán un alza de 20.47% en enero y su factura puede llegar a 399.33 dólares.
La variación para un cliente comercial, también de ENSA, con un consumo de 60 mil kWh al mes será de 15.50% en promedio al pasar de 12,920.78 dólares a 14,923.64 dólares.
Para el caso de Edemet empresa que cuenta con 100% de la energía contratada a precio fijo, la mayoría no tendrá un aumento en su tarifa eléctrica, en algunos casos incluso bajará. Por ejemplo, un cliente residencial que consume 350 kWh que pagaba en diciembre 58.49 dólares, puede que su factura llegue en enero a 56.67 dólares, -3.11% menos.
Para los clientes de 1,500 kWh que en diciembre pagaron 376.31 dólares a la distribuidora Edemet, la tarifa sube ligeramente 0.85% para quedar en 379.49 dólares.
La razón de que los clientes de una empresa tengan altos aumentos y los otros no, radica en que no todas las empresas distribuidoras cuentan con precios de energía estables y fijos.
Cristóbal Samudio, presidente de la Comisión de Energía y Combustibles de la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa, explica que las reglas de compra establecen que la demanda debe estar contratada al 100% en un horizonte de 2 años, por lo que una licitación a corto plazo podría cubrir los faltantes de la energía no contratada a las distribuidoras a partir del inicio de suministro que defina el pliego, y en adelante.
Refiere que al estar aproximadamente en 30% expuesta la compra de energía a precios variables o de mercado ocasional (spot) existe una tendencia a que se incrementen los precios al consumidor. Situación que se pudo haber evitado con la contratación con suficiente anticipación de la energía.
“Destacamos que los consumidores no deberían ser afectados por las variaciones de precio en el mercado ocasional, ya que, si logran contratar el 100% de sus requerimientos, no hubiesen sido afectados. Es por ello la importancia de la realización de las licitaciones de corto y largo plazo para cubrir la demanda y atraer nuevas inversiones que al final redundan en la estabilidad y confiabilidad del suministro de energía”, apunto Samudio.
Sostuvo que el anuncio reciente de abrir una licitación a largo plazo en la que participen tanto las generadoras de energías renovables existentes como nuevas, permitirá que ingrese esa energía para estabilizar los precios, una vez que inicie el suministro.
Según la resolución, se establece que la contratación de energía a largo plazo será a partir del 1 de septiembre de 2026 para centrales renovables existentes (solar, eólicas y también hidroeléctricas) y una parte para nuevas centrales desde el 1 de enero de 2029.
“Estas licitaciones estabilizan los precios de compra de la demanda a largo plazo y ello implicaría que los clientes no estén afectados por la volatilidad del costo marginal que cambia hora a hora y que además como vimos está fuertemente influenciado por variaciones climáticas”, explicó Samudio.
La secretaria nacional de Energía, Rosilena Lindo, contestó a La Prensa que se está trabajando con la Empresa de Transmisión Eléctrica (Etesa) para realizar otras licitaciones a corto plazo.
“Esas licitaciones de corto plazo serían con la intención de contratar el excedente de energía que no fue adjudicado en el anterior proceso” y por el cual se genera una exposición al mercado ocasional en el caso de los clientes de ENSA con mayor incidencia en la tarifa eléctrica final, dijo Lindo.
Armando Fuentes, administrador de la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (ASEP) indicó esta semana en rueda de prensa que no se puede volver a quedar la tarifa eléctrica tan expuesta a la variación del precio de la energía en el mercado ocasional, por lo que es clave que se realicen a tiempo las licitaciones de energía tanto a corto como a largo plazo.
Se espera que el 3 de febrero esté publicado el pliego de la licitación de energía a largo plazo exclusiva para renovables, y que el 27 de junio de este mismo año sea la recepción de las ofertas de las empresas que participarán para suministrar los 400 megavatios de energía que se aspiran contratar para suministrar en 2026 y en 2029.
Mientras tanto este semestre los consumidores de algunas distribuidoras ya reportan los incrementos.
La excepción en Bocas del Toro y Chiriquí
Los clientes de Bocas del Toro y Chiriquí están incluidos en el subsidio del Fondo Tarifario de Occidente que fue extendido recientemente y que contempla un monto de 40 millones de dólares que abarca los descuentos al 99% de los clientes, según informó el administrador de la ASEP, Armando Fuentes.
En un ejercicio de cálculos, la tarifa eléctrica para clientes de alta demanda de energía BTD donde se ubican a los comercios y empresas pueden registrar un incremento de 17.81% en promedio y si se trata de una mayor demanda de energía puede alcanzar hasta 19% en el caso de Edechi, pero este incremento es compensado al aplicar a los clientes de esta distribuidora el descuento por el Fondo Tarifario de Occidente (FTO).
Por ejemplo, un usuario comercial de Edechi que en diciembre consumió 60 mil kWh de energía y pagó 13,303.27 dólares, la factura le puede llegar este mes con un cargo de 15,672.54 dólares, un alza de 17.81% o 2,369.27 dólares. Pero al aplicar el descuento de FTO de -49.59% tendrá una rebaja de 7,900 dólares.
Si es un cliente residencial con un consumo de 1,500 kWh, en diciembre pagaba un promedio de 368.21 dólares y este mes la factura tendrá una variación de 20.56% para un cargo total de 443.91 dólares. Al incluir el FTO, la tarifa al consumidor tendría una rebaja de -52.87% equivalente a 209.21 dólares.
Un cliente también residencial en Edechi con un consumo de 350 kWh pasará de 60.29 dólares a 68.58 dólares, es decir, 13.75%, sin aplicar alguno de los subsidios contemplados por ley. Sin embargo, como aplica también el subsidio del FTO, el descuento sería de -34.65%, es decir, 44.81 dólares menos en la factura.
