La Empresa de Transmisión Eléctrica (Etesa) avanza en su hoja de ruta para ejecutar la construcción de la cuarta línea de transmisión que aumentará la confianza del Sistema Eléctrico Nacional.
Etesa adjudicó el contrato de la consultoría que se encargará de realizar los avalúos comerciales a lo largo de la servidumbre por donde pasará el proyecto eléctrico que se construirá bajo el esquema de Asociación Público Privada (APP).
El consorcio Conavsa & CWork LT4, integrado por las empresas Compañía Nacional de Avalúos y Civil Work, resultó vencedor con su propuesta de 3.5 millones de dólares, superando al grupo empresarial formado por Manhattan PM y Avalúos Inspecciones y Construcciones S.A. que había ofertado 3.7 millones de dólares.
De acuerdo con los términos del pliego de condiciones, el contratista seleccionado tendrá 270 días para ejecutar el proyecto de avalúo.
Los estudios de prefactibilidad indican que el proyecto tendría un costo de 696 millones de dólares, fondos que deben ser aportados por la empresa que se adjudique la construcción y posteriormente, el Estado cancelará la deuda durante los años que dure la concesión, que inicialmente, podría alcanzar los 25 años.
La principal función de Etesa es la de transportar la energía desde las centrales de generación hasta los centros de consumo donde las empresas de distribución Naturgy y ENSA la entregan a los clientes finales.
Etesa tiene capacidad para transmitir 3 mil 500 megavatios, por encima de los 2 mil megavatios de demanda que tiene el país. Con la cuarta línea se aumentarán mil megavatios de capacidad en transmisión en la primera fase y otros mil 500 megavatios en la segunda etapa.
Desde 2016 la empresa estatal viene desarrollando los planes para la construcción de la cuarta línea, pero la licitación realizada en 2018 se declaró desierta luego que ninguno de los proponentes cumplió con los términos solicitados en el pliego de condiciones.
El proyecto tendrá una longitud de 330 kilómetros y además de mejorar la confiabilidad del sistema eléctrico, también permitirá transportar desde el occidente panameño la energía producida por las centrales solares, hidroeléctricas y eólicas que se construyen en ese sector.