La facturación electrónica no es el futuro, es el presente en la economía panameña, así lo expresó el Director General de Ingresos (DGI), Publio De Gracia, quien señaló que se acelerará el proceso para que más empresas, sectores económicos y profesionales adopten este sistema.
Al cierre del 15 de agosto de este año la cantidad de usuarios que han adoptado la facturación electrónica alcanzó los 47 mil 974 y se espera que llegue a 48 mil 400 usuarios en los próximos días, informó Lían Vásquez, jefa de factura fiscal de la Dirección General de Ingreso.
En el foro Café con La Prensa sobre la Facturación Electrónica y su importancia ante la nueva regulación que se realizó en David, Chiriquí, el director de la DGI, junto con Lían Vásquez y Jenny Hernández, gerente general de EBI, explicaron las ventajas y los beneficios de adoptar este sistema de facturación.
Lían Vásquez detalló que la adopción ha sido progresiva, comenzando con 537 usuarios en 2021, para lograr que se unieran al sistema 23,159 usuarios al cierre de 2022.
Para el 31 de julio se habían contabilizado 46 mil 490 usuarios, 101% de incremento en el número de contribuyentes en comparación con 2022.
En lo que va del año 2023 se han emitido 182 documentos de facturación electrónica para un total de 775 millones de dólares reflejados en Impuesto de Transferencia de Bienes Muebles y Servicios (Itbms).
Precisó que la meta es lograr este año que 100 mil contribuyentes usen el sistema, que cuenta con dos modalidades.
La facturación electrónica gratuita que es para los que tienen una facturación de hasta un millón de dólares al año o 200 mil facturas al mes.
Y la modalidad para los contribuyentes que tienen una facturación mayor, que pueden optar por los servicios de una de las 20 empresas que operan como Proveedor Autorizado Calificado, conocidos como PAC.
Se calcula que 80% del total de usuarios de la factura electrónica lo hacen con la modalidad gratuita porque son pequeñas y medianas empresas o personas naturales y 20% a través del servicio de los PAC.
Lían Vásquez recordó que de acuerdo a la Ley 256 que establece la facturación electrónica, todo nuevo registro único de contribuyente (RUC) a partir de 2022 debe tener como método de facturación el electrónico. Por esta vía de los nuevos RUC se incorporaron en lo que va de año 4,206 usuarios que sumados a los del año pasado alcanzan los 10 mil 500 usuarios nuevos que cuentan con este método de facturación.
Resaltó que los sectores que ya tienen que estar usando este sistema al 30 de junio de este año son los proveedores del Estado (desde octubre de 2022), las empresas registradas en la Autoridad Marítima de Panamá, los servicios financieros, las operaciones de carga de petróleo y sus derivados, transporte de pasajeros nacional e internacional terrestre, marítimo y aéreo, alquileres de bienes inmuebles, zonas especiales, zonas libres, zonas francas, hostales con menos de 7 cuartos, empresas sedes multinacionales y empresas sedes manufactureras.
Jenny Hernández, gerente general de EBI, uno de los PAC certificados por la DGI, explicó las ventajas que tiene el sistema, como el ahorro de costos, la simplificación de procesos porque no se tendrá que digitalizar las facturas que son manuales, se podrán hacer uso de los datos para un análisis de tendencias de ventas, las empresas podrán tener un almacenamiento de las facturas.
Resaltó además que el proceso permite que las facturas sean enviadas a los correos electrónicos directos desde la plataforma, pueden personalizarse y se genera un ahorro de papel, espacio y alquiler además de reducir los gastos de envío de facturación fiscal y los ahorros monetarios que se dan porque se podrá cobrar sin límite de tiempo.
“Se puede facturar a cualquier hora del día y desde cualquier parte del mundo y al tener el sistema de facturación electrónica se puede contar con mayor información y mayor capacidad de la data. Se automatizan los procesos y abre las puertas a la innovación”, resaltó Hernández.