El Fondo Monetario Internacional (FMI) anunció que renovó una línea de crédito flexible a dos años para Perú, por $5 mil 400 millones, y dijo que las autoridades peruanas prevén nuevamente tratarla como un instrumento precautorio.
A pesar de una fuerte recuperación en 2021, la economía de Perú sigue expuesta a riesgos elevados, como nuevas oleadas de la pandemia de covid-19, la guerra en Ucrania, un endurecimiento de las condiciones financieras globales e incertidumbre política, señaló el FMI. Esta Línea de Crédito Flexible, diseñada para la prevención de crisis, oficiará como un seguro contra esos riesgos y reforzará la confianza del mercado, explicó.
Las autoridades tienen la intención de tratar el acuerdo como precautorio y salir del acuerdo cuando las condiciones externas lo permitan, dijo Kenji Okamura, subdirector del FMI.
Okamura destacó que Perú canceló la anterior LCF aprobada en mayo de 2020 por 11 mil millones de dólares, y el monto menor solicitado ahora “es un reflejo de los muy sólidos fundamentos del país”.
El FMI creó la LCF en 2009 para atender la demanda de préstamos de prevención y mitigación de crisis de países con marcos de política económica muy sólidos.
El acuerdo funciona como una línea de crédito renovable, sujeto a revisión si es a dos años y no condicionado al cumplimiento de metas de política económica, como ocurre con los programas tradicionales del Fondo.
El FMI dijo a principios de mayo que prevé que el crecimiento de Perú se desacelere a 3% en 2022. El PIB peruano se expandió 13.3% en 2021, tras una contracción de 11% el año anterior provocada por la pandemia.